
El precio de la vivienda en alquiler experimentó en Castilla La Mancha una subida del 5,4% durante el año 2017 hasta situarse en 4,7 euros/m2, según el último informe de precios de idealista.
Todas las provincias registran precios de alquiler superiores a los que tenían hace un año, con la excepción de Cuenca donde cayeron un 2%. Las mayores subidas se han producido en Albacete (9,4%) y Guadalajara (6%). En Toledo el incremento fue del 5,7%, mientras que en Ciudad Real se quedó en el 5,5%.
Guadalajara sigue marcando los precios más elevados, con 5,2 euros/m2 al mes, seguida por Albacete, con 5 euros/m2. En Toledo el precio está situado 4,7 euros/m2, superior a los de Ciudad Real (4,6 euros/m2) y Cuenca (4,2 euros/m2).
Capitales de provincia
Todas las capitales incrementaron sus precios durante los últimos 12 meses. Las mayores subidas se dieron en Toledo (6,2%) y Guadalajara (6,2%). En Ciudad Real ascendieron un 4,8%, en Albacete aumentaron un 4,4%, mientras que en Cuenca crecieron un 1%.
La capital toledana es también la más cara de la comunidad, con 6,1 euros/m2, seguida por Guadalajara (5,7 euros/m2) y Albacete (5,3 euros/m2). En cambio, Cuenca (4,7 euros/m2) y Ciudad Real (5 euros/m2) son las más económicas.
Fuerte subida a nivel nacional
El precio de la vivienda en alquiler ha vivido un repunte en España durante 2017 y ha acabado el año con un incremento del 18,4% que ha dejado el metro cuadrado en 9,7 euros al mes. El último trimestre del año ha frenado el ritmo de crecimiento, ya que los precios se incrementaron sólo en un 3,3%.
Todas las capitales españolas registran en diciembre de 2017 precios superiores a los de hace 12 meses, con las excepciones de Cáceres y Barcelona.
La ciudad de Barcelona ha visto cómo sus precios bajaban un 2,4% en el último año, situando el precio de sus alquileres en 17,5 euros/m2. El ritmo de caída parece haberse incrementado en el último trimestre, con un decremento del 4,6%.
Madrid finaliza 2017 con una subida interanual en el precio del alquiler de vivienda del 7,9%, lo que sitúa el precio del metro cuadrado en la capital en 15,5 euros. Durante el último trimestre del año la capital ha visto cómo sus precios crecían solo un 1,5%.
Santa Cruz de Tenerife ha marcado la mayor subida este año, con un incremento del 22,7% hasta los 8 euros/m2, muy similar a la registrada en la vecina Las Palmas de Gran Canaria (22,5%) y en Girona (20,5%). Por encima del 15 por ciento están Tarragona (17,6%), Granada (16,8%), Palma (16,2%), Málaga (15,4%) o Sevilla (15,2%). En Cáceres los precios se han reducido un 1%. Las menores subidas se han dado en Cuenca (1%), Logroño (2,5%) y Soria (2,7%).
A pesar de la caída, Barcelona sigue siendo es la capital española con los alquileres más caros (17,5 euros/m2), seguida de Madrid (15,5 euros/m2) y San Sebastián (14,1 euros/m2). En cuarto lugar se sitúa Palma con un precio de 12,2 euros por cada metro cuadrado. En la parte opuesta de la tabla encontramos Cáceres, la capital más económica, con un precio de 4,5 euros/m2 mensuales.
Para Fernando Encinar, jefe de estudios de idealista, “2017 ha sido sin duda el año del alquiler en España. Desde enero a septiembre acaparó titulares en prensa y gran parte de la agenda pública. Los precios han subido de manera generalizada en toda España, aunque la tendencia alcista ha ido atenuándose en el último cuarto del año. Hay que destacar también que no todos los mercados han incrementado sus rentas de alquiler de la misma manera: los archipiélagos canario y balear junto con las capitales andaluzas de Málaga y Sevilla, y la catalana Girona lideran las subidas. Madrid, que junto con Barcelona ha sido tradicionalmente punta de lanza del alquiler en España, se queda a la mitad de la media nacional. Barcelona, tras cuatro años de subidas interanuales, es la única capital española junto con Cáceres que acaba el ejercicio con las rentas de sus viviendas en alquiler en rojo”
Para Encinar, uno de los principales motivos para el despegue del alquiler se encuentra en el empleo. El directivo asegura que “con el aumento de la certidumbre laboral muchas personas deciden dar el paso de irse a una casa, de momento en alquiler. Y ante la mejora económica las casas que se alquilaron entre 2011-2013 en un entorno de una profunda crisis económica salen ahora, finalizados sus contratos, a un escenario radicalmente distinto y sus precios despiertan de la hibernación en la que estuvieron durante 7 años”.
