El Juzgado de lo Penal número 1 ha absuelto a F.P.S., el hombre de 91 años acusado por su vecina de disparar y matar a varios gatos que había en el patio de la denunciante, en Villalgordo del Júcar, porque «no ha resultado probado que fuera él el autor de los disparos», tal y como se explica en la sentencia, en la que se detalla que en el juicio solo se consideró probado que el 24 de enero de 2011 fue hallado en el patio de la vivienda de la denunciante un gato de raza siamés, propiedad de ésta, tras sufrir varios disparos con una carabina de aire comprimido de plomos del calibre 5,5 milímetros.
El día 26 de enero de 2011, en el mismo lugar, apareció otro gato de la misma raza, también propiedad de la denunciante, que había sufrido varios disparos con una carabina del mismo calibre. Y el día 3 de febrero de 2011 volvieron a aparecer en el patio dos gatos muertos, en este caso de dueño desconocido, tras haber recibido disparos.
En los fundamentos de derecho que recoge la sentencia se plantea que, a través de la pruebas practicadas, «no se puede considerar probado que el acusado fuera el autor de los disparos» que causaron la muerte de los gatos. En el juicio, dos testigos manifestaron no recordar lo ocurrido y otra testigo, J.R.T., declaró que «ella no vio al acusado disparar, aunque su hermano sí» y dijo «estar segura de que fue él».
Tanto los agentes de la Guardia Civil como J.R.T. sostuvieron que «los balines que causaron la muerte a los gatos eran del calibre 5,5» y ha quedado acreditado, mediante la prueba documental aportada por la defensa al inicio del juicio, que «la carabina intervenida por la Guardia Civil al acusado era del calibre 4,5».
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