La presidenta del Gobierno de Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, ha agradecido al ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, su tarea responsable de coordinar “el problema que tradicionalmente hemos tenido con el agua, no solo en Castilla-La Mancha sino en todo el Levante español”.
En este sentido, al conocerse el borrador definitivo del Plan de Demarcación Hidrológica del Júcar, ha calificado de “gran acuerdo” el que se ha alcanzado; puesto que, “ya en su día, llegamos a un principio de acuerdo que se ha ido perfeccionando y ha sido muy favorable tanto para los intereses de Castilla-La Mancha como para los intereses del Levante español, y ahora le ha llegado el turno al Júcar”.
Según Cospedal, que ha participado junto al ministro en un acto de promoción del aceite de oliva en el Parador Nacional de Toledo, ha sido posible conciliar todos los intereses porque “cuando muchos quieren ponerse de acuerdo, lo consiguen; y es lo que hemos hecho todos los que estábamos en el ámbito de la negociación, gracias al constante aliento del ministerio”.
Mª Dolores Cospedal se ha referido a la conciliación de intereses, como los intereses de los ciudadanos de Albacete que tienen una situación excepcional por una circunstancia medioambiental y que, por lo tanto, no van a tener que pagar por el agua en el ámbito del abastecimiento para el consumo humano, algo que era muy importante; como también lo era en cuanto a los intereses de los regantes tanto de la zona de Castilla-La Mancha como también del Levante español.
Por su parte, el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, ha asegurado en declaraciones a los medios, junto a la presidenta Cospedal, que “tras largas negociaciones y buscando conciliación de todos los intereses, hemos logrado un acuerdo inicial básico para poner en exposición pública la fase final del Plan del Júcar”.
Completando la planificación hidrológica
En este sentido, ha confiado en poderlo llevar pronto al Consejo Nacional del Agua “con el consenso de todos los interesados, conciliando intereses de regantes, del agua en Albacete, y la realización de las obras públicas necesarias para garantizar la mejor utilización de un recurso escaso como el agua con la mayor inteligencia posible”.
Asimismo, ha afirmado que el mismo esfuerzo que se ha hecho para regular las dificultades del Trasvase Tajo-Segura se ha tenido con este plan, “buscando la mayor armonía de intereses”, de tal forma que se está completando una planificación hidrológica que tendríamos que haber tenido lista en 2009, pero que el Gobierno anterior fue incapaz de acometer, mientras que el actual Ejecutivo lo ha hecho en menos de dos años.
Por todo ello, ha insistido que así “podremos hacer un Pacto Nacional del Agua que culmine en un Plan Hidrológico Nacional que resuelva los problemas del agua en España”, ha concluido.
Los ciudadanos de Albacete no tendrán que pagar «ninguna compensación ni indemnización» a los regantes valencianos por beber agua del Júcar, tal y como estaba establecido desde la firma del convenio de Alarcón derivada del anterior plan de 1998, según recoge el borrador definitivo del plan de demarcación hidrológica del Júcar, que ya se ha publicado. El borrador deberá ser aprobado ahora por los órganos correspondientes, antes de su paso por el Congreso.
Así lo ha avanzado hoy en rueda de prensa la consejera de Fomento, Marta García de la Calzada, que ha destacado que esta decisión es «un paso adelante histórico en la solución de un problema que venía enquistado» desde hace tiempo y con el que el Gobierno de Castilla-La Mancha «había manifestado su discrepancia» a través de las alegaciones presentadas al borrador.
Ha admitido que tras el periodo de información pública se han recogido las «principales» alegaciones del Ejecutivo regional, entre las que figura esta, que pone fin «a un agravio que venía desde hace tiempo».