La Familia de Isidro Moya, que a principios de semana denunciaba el retraso hasta en cuatro ocasiones de la operación de su padre, enfermo de Parkinson, ha detallado en las redes sociales que ayer ya fue operado, a la quinta, aunque no quieren que su caso quede en el olvido y se repita.
Antes de la operación mostraron «nuestra indignación e impotencia, ante la gran injusticia que está viviendo nuestro padre y, como él, otras muchas personas en situaciones similares. Nos vemos obligados a usar este y cualquier otro medio de comunicación que este en nuestra mano, para hacer llegar a todos los ciudadanos la vergonzosa situación en la que se encuentra a día de hoy el Hospital Universitario de Albacete».
Detallaron que: «Nuestro padre, Isidro Moya Martínez, prestando servicio como policía local en esta ciudad durante más de treinta años, sacrificando su vida por su familia y su profesión al cien por cien; recibe en el año 2003, a los 55 años de edad, la brutal noticia de su diagnóstico de la enfermedad de Parkinson Idiomático, es propuesto después del verano 2015 por su neuróloga para someterse a la operación de estimulación profunda, intervención que ya de inicio se pospone hasta el año 2016».
