La sede de la Cooperativa OPAZ en Villarrobledo ha acogido la jornada final del proyecto INNOVAT-ES, ejecutado por la Fundación Cellbitec, la Fundación Legado Bustillo y la Cooperativa OPAZ, y financiado por la convocatoria 2024 del Plan Estratégico de Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de Economía Social del Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Con cerca de medio centenar de asistentes, la jornada ha servido para presentar el Plan Estratégico Nacional del Azafrán 2026-2030, una hoja de ruta que busca modernizar el sector, impulsar la innovación, fomentar la sostenibilidad y consolidar la proyección internacional del azafrán español.
El acto, que ha inaugurado la viceconsejera de Política Agraria Común y Política Agroambiental de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, Gracia Canales, y ha clausurado el alcalde de Villarrobledo, Valentín Bueno, ha contado con la presencia del delegado de Agricultura en Albacete, Ramón Sáez, y la presidenta de la DOP Azafrán de La Mancha, Valentina Cabra, así como de los representantes de la agrupación: Antonio del Saz, director de la Fundación Cellbitec y coordinador del proyecto; Reyes Samper, de la Universidad Católica de Murcia (UCAM); Miguel Ruiz, director de la Fundación Legado Bustillo, y Carlos Fernández, presidente de OPAZ, Sociedad Cooperativa de Castilla-La Mancha. También han asistido representantes de Cooperativas Agroalimentarias y del ITAP de Albacete, así como concejales de distintos grupos políticos del Ayuntamiento, entre ellos María Elena Castellanos, del PSOE, o Mario de la Ossa y Rubén Nieves, de Se Puede Villarrobledo.
En su intervención, la viceconsejera ha puesto en valor la importancia de este Plan Estratégico para que el sector del azafrán pueda abordar los retos que enfrenta el cultivo:
“Lo que vemos es que las superficies de cultivo van disminuyendo y Castilla-La Mancha no se puede permitir el lujo de perder este producto”.
En este sentido, ha subrayado que el papel de la Administración tiene que ser el de acompañar a este tipo de iniciativas y ha avanzado que la Consejería está trabajando para poner en marcha a partir de enero más de 40 Grupos Operativos de innovación agroalimentaria entre los que el azafrán tendrá un papel relevante: “Creemos que debe ser así por la relevancia cualitativa que tiene este cultivo en nuestra región”. “Esperamos que estos proyectos en su conjunto alcancen resultados tan potentes y evidentes como este Plan Estratégico a cuya jornada de divulgación estamos asistiendo hoy”.
Soluciones para un modelo competitivo y sostenible
La presentación con detalle del Plan Estratégico Nacional del Azafrán 2026-2030, documento que aborda los desafíos estructurales del cultivo, como la caída de la producción nacional, la falta de relevo generacional, la necesidad de tecnificación y la promoción del empleo femenino, y propone soluciones que combinan tradición y modernidad, consolidando un modelo competitivo y sostenible para el futuro, ha corrido a cargo de Reyes Samper, de la Universidad Católica de Murcia, y Miguel Ruiz, director de la Fundación Legado Bustillo.
El Plan Estratégico, han dicho, se estructura en seis ejes fundamentales: la innovación y modernización de los procesos de cultivo y producción; la garantía de la calidad y trazabilidad mediante certificaciones avanzadas; la internacionalización y expansión en mercados Premium; la vertebración del sector a través de la cooperación entre productores, la formación y capacitación de nuevos profesionales; y la sostenibilidad integral que combina viabilidad económica, responsabilidad ambiental y cohesión social.
Y es que, este Plan no es solo una misión económica, “es también un compromiso social con nuestras comunidades rurales y cultural con la identidad gastronómica española” y, por ello, la formación y el acompañamiento técnico incluidos en el plan son herramientas clave para asegurar la transferencia de conocimiento y la incorporación de nuevas generaciones y talento femenino, contribuyendo así a la revitalización del sector y a la fijación de población en las zonas rurales.
La jornada también ha contado con la intervención de Valentina Cabra Carrasco, presidenta de la DOP Azafrán de La Mancha, y Carlos Fernández Segovia, presidente de OPAZ, quienes han destacado las nuevas oportunidades que este Plan Estratégico abre para los productores y cooperativas. Ambos han resaltado la importancia de afrontar los problemas estructurales del sector generando nuevas cadenas de valor, fomentando la incorporación al cultivo, avanzando en mecanización y profesionalización del sector, todo ello para garantizar la competitividad del Azafrán de La Mancha en los mercados internacionales.
También han puesto el acento en la importancia y beneficios que la unión de productores y empresas puede aportar al sector. En este sentido, el presidente de OPAZ ha resaltado que a través de la cooperativa se está trabajando en la automatización de procesos y en un sistema de cultivo hidropónico en condiciones controladas. “En OPAZ contamos con la mayor superficie cultivada de azafrán en España y hemos apostado muy fuerte por un producto de calidad diferenciada con un peso muy relevante tanto en Castilla-La Mancha como a nivel internacional. Nuestro objetivo es hacer todo lo posible para defenderlo y potenciarlo”.
Un modelo replicable
Este Plan Nacional es uno de los pilares del proyecto INNOVAT-ES, cuyo objetivo principal, según ha explicado el coordinador del proyecto, Antonio del Saz, ha sido apoyar, reforzar y acompañar a las cooperativas del sector agroalimentario, promoviendo un tejido económico inclusivo y sostenible.
En su ejecución, ha dicho, el proyecto ha centrado sus actuaciones en el sector del azafrán porque “es un cultivo que refleja de manera ejemplar los retos estructurales del sector agroalimentario español, como la necesidad de relevo generacional y de atraer nuevos trabajadores, la baja tasa de empleo femenino, la adaptación al cambio climático y el ahorro de recursos, la pérdida de población en las zonas rurales y la urgente necesidad de innovación y tecnificación”.
Además, el azafrán español es reconocido mundialmente por su calidad, pero la producción nacional ha caído un 95% desde 1985, poniendo en riesgo la supervivencia de este patrimonio milenario. Entre los factores clave de esta situación se encuentran la falta de relevo generacional, el abandono de parcelas tradicionales y la competencia de países productores con costes más bajos, como Irán, Marruecos o Afganistán.
Por ello, este proyecto no solo busca modernizar el sector del azafrán, “sino generar un modelo replicable para todas las cooperativas agroalimentarias de España, fomentando la innovación, la sostenibilidad y la participación de nuevos profesionales, especialmente mujeres y jóvenes, para lo que se han desarrollado además un conjunto de acciones complementarias dirigidas a fortalecer el sector, entre las que se incluyen la implementación de programas formativos de distintos niveles, desde cursos básicos hasta formación especializada y avanzada”, ha indicado.
El acto ha concluido con la intervención del alcalde de Villarrobledo, Valentín Bueno, quien ha resaltado la importancia de apostar por la innovación y la tecnología para garantizar la supervivencia del cultivo del azafrán. En este sentido, ha felicitado a la Cooperativa OPAZ, Fundación Cellbitec y Legado Bustillo por llevar a cabo el Plan Estratégico y el proyecto INNOVAT-ES que, en su opinión, contribuirán a asegurar un futuro competitivo y sostenible para la producción de azafrán en la zona, al tiempo que fortalecerán la economía rural y la fijación de población.
Para finalizar, la cocinera manchega Teresa Gutiérrez, propietaria del Restaurante Azafrán y embajadora del Azafrán de La Mancha, ha preparado en directo un risotto con Flor de Opaz, DOP Azafrán de La Mancha, la marca propia de azafrán que produce y comercializa la Cooperativa OPAZ.
