El Albacete Balompié vio en la Ciudad Deportiva de la Real Sociedad, frente a su filial, lo difícil que van a ser los campos y rivales vascos en el Grupo II de Segunda B. Se adelantaron los de Aira en el 31 y fueron ganando hasta pasado el minuto 80, cuando el rival le dio la vuelta al marcador en cinco minutos. Todo parecía perdido pero cometieron penalti sobre José Fran, que había entrado en la segunda mitad, y que el propio jugador transformó en el 2-2 que sería definitivo.
Fran Carnicer anotó el 0-1 pasada la media hora de juego, al sacar de manera excelente una falta y contar con el error del meta local, que hizo que se le escapara el esférico de las manos y el balón acabara dentro de la portería.
El partido se iba 0-1 al descanso pero era evidente que no era suficiente renta para estar tranquilos en la segunda mitad. El Alba había dominado por momentos en la primera parte pero el encuentro estaba abierto, la Real B no era un rival fácil y en cualquier momento podía llegar el gol de cualquiera.
Eneko, que disparó fuera cuando estaba solo frente al portero, -antes del gol de Carnicer- había tenido una de las ocasiones más claras del encuentro.
El jugador no volvió tras el paso por vestuarios y entró en su lugar Eloy Gila. Pocos minutos después, Aira realizó un nuevo cambio y Fran Carnicer se retiró a vestuarios, quejándose de una pierna, si bien también es cierto que el jugador había visto la amarilla ya en la primera mitad. Por Fran Carnicer entró Marc Rovirola.
Aira agotó sus cambios cerca del minuto 70 al dar entrada a José Fran -que sería decisivo en el empate- por Josan.
En la segunda parte, la Real Sociedad volvió con más fuerza y crearon mucho más peligro en el área de Tomeu Nadal de lo que lo habían hecho en toda la primera parte. Especialmente en la recta final consiguieron que el partido casi se jugase en el área del Alba.
Así llegaron los dos tantos en cinco minutos, el primero una sensacional jugada de Bautista, en la que acertó a controlar el esférico, fue capaz de detenerlo para posicionarlo, darse la vuelta y batir a Tomeu Nadal, que nada pudo hacer por evitar el tanto que suponía el empate. Poco después daban la vuelta al marcador, pero el Alba acababa rascando un punto en un terreno difícil. Nadie dijo que esto fuera a ser fácil.
