En la semifinal del US Open, una pareja nacional francamente inesperada se colaba: Pablo Carreño y el albaceteño Guillermo García López.
Su último escollo eran los cabezas de serie número cuatro, Jamie Murray y Bruno Soares. Empezaron bien pero no pudieron vencer.
Carreño y García López asustaron de inicio a británico y brasileño. Rotura a las primeras de cambio que fue automáticamente respondida de idéntica manera. Hasta el 2-3, en contra para los españoles pero con saque a favor, el partido se movió en la igualdad y en constantes pelotas de break. Hasta que recibió atención médica el hermano de Andy Murray por molestias en el cuello. Tras ello, un vendaval se cernió sobre los doblistas nacionales.
Pese a la racha negativa, siguieron intentándolo. No fue tanta la diferencia en el juego como indicó el 6-2 y 6-3 final.
Por cierto, que se llevan 310.000 dólares como finalistas.