La multinacional Marktel Global Services ha anunciado un Expediente de Regulación de Empleo para su centro de Albacete, ERE que supondría el fin de sus 55 puestos de trabajo así como el cierre de dicho centro. La Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT informa de que la empresa ha justificado “causas organizativas” y “el fin de la última campaña que quedaba en Albacete”, pero la noticia llega después de que la justicia forzara a la empresa a reconocer la categoría profesional de cuatro de sus empleados como gestores telefónicos en lugar de teleoperadores y a pedir indemnizaciones por despidos improcedentes. La respuesta de la dirección ha sido lanzar una oleada de despidos en el centro de Albacete.
La plantilla de esta compañía, dedicada a ofrecer servicios de call center, ronda los 5.000 trabajadores repartidos en Valencia, Madrid, Barcelona, Albacete, Portugal y Colombia. Entre sus clientes se encuentran Orange, Caixa, Aguas de Valencia, Mapfre, Santa Lucía, Adeslas, Línea Directa, Carrefour, Mutua Madrileña o Iberdrola. Pese al volumen de trabajo de otros centros y las continuas campañas que desempeña en ellos, la multinacional se niega a desviar la carga de trabajo al centro de Albacete (donde sólo disponía como cliente a Vodafone), algo que el sindicato considera viable y que demuestra la mala fe de Market Global Services, que prefiere castigar a un grupo de trabajadores vulnerables por haber reclamado que se cumpla el convenio laboral.
Además, la empresa lleva un año reduciendo su plantilla, pasando de los casi 200 empleados en 2024 a los 55 trabajadores actuales, recurriendo a despidos improcedentes tras meses de bajas por enfermedades, principalmente, psicológicas. La empresa alegó en la mayoría de los casos despidos por sanciones graves y bajo rendimiento voluntario. En este momento, la práctica totalidad de la plantilla ha
demandado a la empresa por su categoría profesional y se están ganando las reclamaciones por despido improcedente y categoría en los tribunales.
Los representantes de la empresa ya habían amenazado con cerrar el centro durante las negociaciones previas al ERE si la presión sindical se mantenía. UGT -sindicato mayoritario en el Comité de Empresa- denuncia que ahora, y dispuestos a cumplir su amenaza, los responsables de Market Global Services han decidido cerrar y dejar a sus trabajadores y a sus familias en la cuneta antes que cumplir con la normativa.
UGT reclama que se detenga el ERE al no tener causa justificada; que se adjudique carga de trabajo; y que se fomenten nuevas campañas para garantizar la rentabilidad del centro de Albacete, al ser este un contact center que no requiere una localización específica para prestar servicios en cualquier parte, en lugar de cerrarlo como castigo por reclamar legítimamente los derechos de sus trabajadores y trabajadoras.
La empresa insiste en el cierre del centro de Albacete y, hasta la fecha, solo ha realizado una oferta de indemnización que está muy por debajo de lo que los trabajadores obtendrán de acudir a los tribunales para reclamar.
Atendiendo a las sentencias ya ganadas, la empresa deberá indemnizar a la plantilla, al menos, con salario diario por categoría de gestor telefónico, atrasos de un año y cotizaciones a la Seguridad Social de hasta cinco años en función de jornada y antigüedad.
El sindicato también exige que las instituciones públicas, locales y regionales que han invertido el dinero de todos en esta empresa “incumplidroa” le pidan explicaciones y apoyen a las personas trabajadoras de cara a evitar otra masa de despidos por la mala gestión de los responsables de la compañía.
