Zara abre en Londres por primera vez en el mundo un novedoso concepto temporal repleto de innovaciones tecnológicas, según lo cuenta Expansión. Estará abierto hasta mayo en Stratford e incorporará una novedosa experiencia de compra donde no será necesario guardar cola.
Eso sí, los productos no serán gratis pero, en lugar de pasar por caja, las dependientas de la tienda llevarán datáfonos con bluetooth para cobrar en cualquier punto de la tienda. A menudo con el roce de una tarjeta de banco al dispositivo tecnológico de la tienda.
Aunque el objetivo de este nuevo experimento es la sustitución progresiva de la venta física por la online, el ámbito tecnológico va acaparando poco a poco al geográfico. Hoy empiezan por enseñar para vender una pequeña colección de prendas a través de tabletas y dispositivos móviles que pueden adquirirse online en la misma tienda. Este es el primer paso para llegar, en el futuro, al catálogo entero de la marca por pantalla. Mirarlo y seleccionarlo por el dispositivo electrónico, adquirirlo y pagarlo, y recogerlo en casa o en la tienda.
Otra de las innovaciones que pone a prueba Inditex para diseñar la tienda del futuro es el espejo-pantalla que facilitará el tamaño y las medidas reales del consumidor con respecto a las tallas de la tienda a través de la tecnología RFID (identificación por radiofrecuencia). Una prueba de la ropa virtual que también adelanta Expansión.
