Encontrar fecha libre en un fin de semana en el trazado albaceteño se ha convertido en misión imposible en lo que queda de año. Las rodadas moteras organizadas por empresas especializadas se imponen
Casi doscientos pilotos y más de cuatrocientas personas se han dado cita este fin de semana en el Circuito de Albacete. El sábado, con la organización de Box71 y la dirección del piloto Iván Hilario, fueron un centenar los moteros que, divididos en grupos y bajo la supervisión de monitores expertos, disfrutaron del nuevo trazado. El domingo, otros noventa pilotos llegaron para rodar con la supervisión y el tutelaje de pilotos como Sergio Ortega o Raúl Martínez, ambos del Albaracing.
“Las carreteras no son seguras ni se puede correr en ellas –comenta el piloto Iván Hilario, responsable de Box71-. Por eso se imponen fórmulas como éstas que proponemos a lo largo del año en distintos circuitos de España. Dividimos al grupo en tres niveles (principiante, medio y avanzado), salen a pista en tandas de veinte minutos cada hora y aquí se consiguen dos cosas: exprimir al máximo las cualidades de la moto y aprender y mejorar las aptitudes de cada motero”.
La fórmula parece funcionar porque, de esta forma, si uno intenta alquilar el Circuito en sábado o en domingo desde ahora hasta el mes de diciembre sólo podrá hacerlo en alguna de las sesiones nocturnas que aún quedan disponibles y que sólo este trazado ofrece al ser el único iluminado. Además, cada piloto suele venir acompañado por una o dos personas, cuando no por toda la familia, por lo que hoteles o restaurantes también se benefician de la presencia de más de doscientas personas cada día de alquiler.
Sobre el Circuito de Albacete y su renovación, Iván Hilario, ganador 2014 del Campeonato de España de Velocidad de Master 35 en Open 1000, explica que “ahora es más técnico y a los participantes les gusta el cambio. Eso sí –añade- les cuesta adaptarse a algunos de los cambios, pero la seguridad que transmite es increíble. En este sentido, hay que decir que en este tipo de grupos en los que hay gente menos experta suele haber salidas de la trazada que antes acababan en la tierra y con la jornada del piloto. Ahora, al ser de asfalto, la posibilidad para rectificar es mucho mayor y un día de fiesta y aprendizaje no se trunca por un pequeño fallo”.
Javier, uno de los participantes de esta jornada en Albacete indicaba que “el circuito me ha gustado mucho. La curva que sustituye a la de la cafetería es muy técnica, con una frenada con reducción inclinado que mola, y la salida de la recta de atrás es muy guapa… Sse verán finales de carrera espeluznantes ahí y no se me olvida que el final de recta es mucho mas técnico también, así que ya les he dicho que cuenten conmigo para la rodada que han preparado para noviembre”.