El Albacete Balompié ha vuelto este miércoles a los entrenamientos y lo ha hecho bajo un sol de justicia que habrá influido en las caras y gestos de cansancio tras la primera toma de contacto con el balón en la Ciudad Deportiva Andrés Iniesta tras las vacaciones. Hemos visto gestos de cansancio pero también de buen rollo, de simpatía, de ganas de empezar a trabajar y luchar por el sueño del ascenso.
Ha sido como el primer día del cole y en muchos sentidos, ya que se notaba que los jugadores se ‘iban más’ con quienes conocían mejor; los veteranos más juntos, los canteranos también y los nuevos, como Rubén Cruz, con Ramón, con el que coincidió en el Écija.
Esperamos que esta se la plantilla con la que por fin festejemos el ansiado ascenso.