Estos días se habla mucho del ciberdelito que afectó a la empresa de transporte urbano en Valencia EMT, a la que estafaron 4 millones de euros con una sola llamada y un mail. Un timo de ‘manual’ que también afecta a empresas de Albacete -entre otras muchas ciudades-, como lo ha puesto de manifiesto José Luis Jiménez, ingeniero de ciberseguridad de la empresa valenciana Nunsys, en una información de El Mundo.
«El objetivo es engañar a empleados con acceso a los recursos económicos para que paguen una factura falsa o hagan una transferencia desde la cuenta de la compañía. Para ello el estafador llama o envía correos electrónicos haciéndose pasar por un alto cargo de la compañía». Así describe Interpol la esencia del fraude del CEO (así conocido por la denominación anglosajona del director ejecutivo), la picaresca que ha puesto cuatro millones de la EMT en manos de delincuentes en un abrir y cerrar de ojos.
Suelen hacerlo con una llamada suplantando a un abogado de reconocido prestigio y enviando poco después un mail con los pasos a seguir para hacer el pago.
Se trata del llamado fraude del CEO, que se ha convertido ya en uno de los timos cibernéticos más habituales. De hecho, el FBI americano calcula que esta práctica, detectada en al menos 177 países, reportó a los criminales en torno a 24.000 millones de euros entre 2016 y 2019.