Lo cuenta el diario AS; Ni Valdés ni Courtois. El Zamora de España –el portero con mejor coeficiente de goles encajados– juega en Tercera, es hispano venezolano y estuvo en la cantera del Alba. Luis Arellano Moreno (nacido en Caracas en 1989) es el guardameta que puede presumir, a estas alturas del calendario del mejor registro de todas las categorías.
Su magnífico trabajo en la custodia de la portería del Mensajero, tercer clasificado del grupo canario, le sitúa con una media mejor que la de cualquier cancerbero de todas las divisiones. Luis ha recogido, en total, siete balones de su portería en un total de 19 partidos. Dicho de otro modo, recibe un tanto cada cuatro horas.
«En Venezuela le han dado una grandísima repercusión», cuenta orgulloso. En cualquier caso, su proverbial humildad preside sus manifestaciones. De hecho, lo primero que hace es «agradecer el trabajo del resto de los compañeros, que es lo que permite mantener un promedio así», dice al diario AS.
Solo un equipo de toda la competición (el Granadilla, en la novena jornada) ha sido capaz de hacerle más que un gol. Y su último tanto lo encajó hace un mes, el 1 de diciembre contra el Ibarra, así que lleva cuatro jornadas imbatido.
El talento de Luis es indiscutible. Igual que su dedicación plena al deporte, su carácter afable y su compromiso con todos los equipos donde ha militado. Que no esté en una división superior es una injusticia. Así lo creen sus compañeros, si bien él prefiere justificarlo de otra manera.
«Son las cosas del fútbol moderno», explica. Lo que quiere decir es que ha rechazado proposiciones de Segunda B porque apenas le ofrecían el dinero justo para mantenerse. «Con 500 euros no te vale la pena salir fuera de casa», explica.
«Sigo trabajando para ser profesional el día de mañana», enuncia. «Ésa es mi ilusión», explica Arellano. Entrenar a los filiales de su club es su otra pasión y los niños ven en él a un ídolo. No es para menos. Es Luis Arellano, nada menos que el guardameta menos batido de España.