Tras una primera noche de angustia lejos de casa y con el temor a nuevos desprendimientos, el edificio cuya fachada se derrumbó -por dos veces- ayer jueves, en la calle Arquitecto Vandelvira esquina con la calle La Estrella, no ha sufrido más desperfectos.
Los responsables del Servicio de Bomberos de Albacete seguían este mediodía en la zona, hasta la que se ha vuelto a acercar el alcalde de Albacete, Manuel Serrano, para interesarse de nuevo por la situación de los vecinos y mostrar la ayuda del Ayuntamiento. Se ha reunido con el presidente de la comunidad de vecinos, Javier Ortega, que, como narraba ayer a Masquealba estaba especialmente preocupado por el realojo de cuatro jóvenes estudiantes que residen en la torre del edificio que tuvo que ser desalojada.
Hasta estas viviendas se han ido acercando hoy los vecinos para sacar algunos enseres, siempre acompañados de personal del Servicio de Bomberos y extremando las precauciones en el acceso al edificio, que data de la década de los 60, fue de los primeros de protección oficial y contaba con todos los informes favorables, como ayer lo ponía de relieve Ortega.
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El suceso, que de milagro no causó daños personales, sigue generando una gran expectación en el barrio y varios vecinos se detenían para ver cómo bomberos y técnicos seguían trabajando en el interior del mismo para evaluar cómo se encuentra la estructura de este bloque de viviendas.
Todavía deberá pasar algún tiempo hasta que los vecinos puedan volver por completo al mismo. De momento, están realojados en casas de familiares y amigos, si bien el Ayuntamiento ha puesto a disposición sus recursos por si los necesitaran.
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