La tasa de riesgo de pobreza o exclusión social en Castilla-La Mancha, como también en la provincia de Albacete –según datos de entidades como Cáritas- alcanza ya el 2013 el 36,7 por ciento de la población o, lo que es lo mismo, casi cuatro de cada diez ciudadanos de esta tierra viven en situación de riesgo de pobreza, según la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Además, resulta también alarmante que, según este informe Castilla-La Mancha se sitúa por encima de la tasa española de riesgo de pobreza o exclusión social (27,3%) en un ranking que encabeza la región de Andalucía (38,3%) y finaliza Navarra (14,5%).
Los hogares con más riesgo de pobreza son aquellos formados por un único adulto y con niños o personas dependientes a su cargo, que suponen un 38%.
La tasa se calcula siguiendo el indicador europeo AROPE, que combina distintas variables que van desde los ingresos o la intensidad en el empleo hasta la capacidad de los hogares para afrontar determinados gastos, como mantener caldeada la casa en invierno o pagar a tiempo los recibos.
Junto a estos datos, el INE ofrece su propia estadística de población en riesgo de pobreza, una tasa que se calcula atendiendo al nivel de ingresos tomando como referencia la mediana nacional y que no mide pobreza absoluta, sino desigualdad. Se considera que una persona está bajo el umbral cuando percibe menos del 60% de la mediana, es decir, en 2013, 17.040 euros al año para una familia de dos adultos con dos hijos.
El estudio pone de manifiesto que la renta media por hogar en la región es de 22.256 euros, unos 4.000 por debajo de la media nacional.
Según este estudio, Castilla-La Mancha es la región con mayor porcentaje en riesgo de pobreza con un 31,3 por ciento, mientras que Navarra es la región con una tasa más baja, un 9,9 por ciento. Y es que el 19,3% de los hogares castellano-manchegos llega «con mucha dificultad» a fin de mes.
Además, un 37,8% de los hogares de Castilla-La Mancha no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos y el 11,2% tiene retrasos en los pagos a la hora de abonar los recibos de la vivienda. Además de todo ello, los ciudadanos de Castilla-La Mancha que no se pueden permitir ir de vacaciones fuera de casa una semana al año, fueron el 50 por ciento.
El 5% de los hogares no puede permitirse en esta provincia tener coche y el 8,8% tener un ordenador, según el mismo estudio.