380
Tremendo susto el que se ha llevado el guardameta del Albacete Balompié, Lizoain, en la última jugada del partido de este sábado frente al Racing de Santander.
Salvó el gol, eso sí, aunque jugándose la cara. Y es literal, sólo hay que ver cómo le quedó la ceja con sangre tras la misma.
Cierto es que luego se rebotó contra Castro, acusándole de que no tenía que haber metido el pie. Menos mal que le ha dado más bien justo en la ceja porque sino habría sido bastante peor.
De hecho, de inicio veíamos como Lizoain se asustaba pensando en qué podría haber pasado. Al final, por suerte, quedó más en el susto.