El Gobierno de Castilla-La Mancha tiene en el centro de su acción política al campo y a la industria agroalimentaria y así lo pone de manifiesto que este año la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural haya gestionado 1.070 millones de euros destinados directamente al sector, 24 más que el año pasado.
“Se trata de una cifra que consolida a Castilla-La Mancha como una de las regiones que más recursos moviliza en apoyo a agricultores y ganaderos, aportando certidumbre, liquidez y confianza en un momento clave para el campo. Todo ello desde la convicción de que nuestro sector es esencial para la economía y la cohesión territorial regional”. El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, lo ha explicado con estas palabras en el balance que ha realizado en la Delegación de la Junta en Albacete, donde ha estado acompañado por el delegado de la Junta en la provincia, Pedro Antonio Ruíz, y el equipo directivo de la Consejería.
En este encuentro con la prensa, el consejero ha explicado que “el mandato de nuestro presidente, Emiliano García-Page, es garantizar la viabilidad de las explotaciones, reforzar la renta de agricultores y ganaderos, impulsar la modernización y acompañar al sector en su transformación hacia un modelo más competitivo y sostenible”, para lo cual, la Consejería combina ayudas directas, inversiones en infraestructuras y políticas de desarrollo rural.
Comenzando por la Política Agraria Común, Julián Martínez Lizán ha dejado claro que es una herramienta fundamental para sostener la renta agraria y garantizar la continuidad de miles de explotaciones y la prueba es que durante este ejercicio se han abonado 698 millones de euros en ayudas directas de la PAC correspondientes a la campaña de 2024 y al anticipo y saldo de la PAC 2025.
“Estas cifras dan cuenta de la envergadura que tiene la PAC para nuestra región y la solidez de la negociación de la PAC actual, defendida por Castilla-La Mancha, que hoy se traduce en más recursos y mejores condiciones para agricultores y ganaderos”, ha apuntado, a la vez que ha vuelto a insistir, de cara al próximo periodo, en que “no nos satisface la propuesta económica presentada, pero tampoco las normas de gobernanza, por eso garantizo que vamos a seguir reivindicando, siempre de la mano del sector, una PAC más justa, que atienda las realidades y las necesidades de Castilla-La Mancha”.
Industria agroalimentaria: baluarte económico, imagen de marca y referente internacional
Otro de los baluartes y motores de la economía regional es la industria agroalimentaria, “que además nos da una imagen de marca y una gran proyección internacional”, como ratifica que mes tras mes sea el sector más exportador y que, en los nueve primeros meses de 2025, haya alcanzado 2.904 millones de euros en ventas exteriores, un 6,1 por ciento más que en el mismo periodo del año anterior y un 87,3 por ciento más que en 2015, con lo que “se han doblado, prácticamente, las exportaciones en una década”, ha valorado el consejero.
Con el objetivo de apoyar a esta industria, en 2025 se han destinado 140,8 millones de euros para reforzar su competitividad y generar mayor valor añadido. De esta cantidad, en la línea FOCAL, “que ha permitido afrontar un proceso de modernización, de agrandamiento de nuestras empresas y de mejora en los procesos de transformación y comercialización”, se han abonado 58,6 millones, con los que se culmina y se da por cerrado definitivamente el periodo 2014-2022. Un periodo que ha beneficiado a 1.023 industrias agroalimentarias y que ha permitido movilizar cerca de 1.300 millones de euros de inversión privada para modernizar instalaciones, mejorar procesos productivos y reforzar la competitividad. A la línea VINATÏ y destilación de subproductos se han destinado 42,8 millones de euros.
El apoyo al sector vitivinícola se completa con las ayudas a la reestructuración de viñedo y la cosecha en verde, con 36,7 millones de euros pagados para mejorar la competitividad y el equilibrio del mercado. Y también en 2025, el Gobierno regional ha destinado 2,7 millones de euros a la promoción de los productos agroalimentarios.
Desarrollo Rural, incorporación de jóvenes y modernización
El desarrollo rural es una prioridad para el Gobierno regional como herramienta “para generar oportunidades, crear empleo y fijar población en el territorio”. Así, en 2025 se han destinado 124 millones de euros a políticas de desarrollo rural, de los que 26,4 millones de euros, correspondientes al PDR y al PEPAC, se han gestionado través de los 29 Grupos de Desarrollo Rural, “que están logrando una altísima ejecución de los fondos”.
Otros 7,8 millones se han destinado a distintas convocatorias de jóvenes dirigidas a consolidar las nuevas empresas agrarias que han puesto en marcha, reforzando así el relevo generacional y el futuro del sector. Cabe recordar al respecto que, en lo que va de legislatura, 1.552 jóvenes tienen resolución favorable de incorporación para crear su propia empresa agraria.
Además, “este esfuerzo no se queda aquí, porque el pasado martes aprobamos en Consejo de Gobierno una nueva convocatoria de incorporación y planes de mejora del periodo 2023-2027, dotada con 31,1 millones de euros, que hoy se publica en el Diario Oficial”. Nunca se habían hecho tres convocatorias en años consecutivos, pero esta nueva convocatoria permitirá seguir incorporando talento al sector y avanzando en la modernización de las explotaciones agrarias.
Para completar este bloque, el consejero ha dado cuenta de las inversiones para modernizar el campo y las infraestructuras rurales. Se han destinado 49 millones a la modernización, innovación y digitalización de casi 1.500 explotaciones, impulsando la agricultura 4.0, la renovación de maquinaria y la mejora del bienestar animal, “líneas clave para garantizar la competitividad económica y medioambiental del sector”, ha aseverado Martínez Lizán.
A estas inversiones se suman 34,6 millones de euros para la modernización y transformación de regadíos, fundamentales para un uso más eficiente del agua; 3,2 millones de euros para la mejora de caminos rurales, ligados a concentraciones parcelarias; y tres millones de euros adicionales para reparar los caminos dañados por la DANA de octubre de 2024, garantizando el acceso a las explotaciones y la actividad diaria del sector.
Sostenibilidad, sequía, gestión de riesgos y sanidad animal
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha abordado también la problemática de la sequía. Así, para apoyar a las explotaciones afectadas por ella ha ingresado “estos días 5,5 millones de euros a los agricultores profesionales del sureste de la región”. Por otro lado, la apuesta por modelos productivos sostenibles se refuerza con cerca de 31 millones de euros para la agricultura y ganadería ecológicas.
Para seguir apoyando a los agricultores y ganaderos para hacer frente a los riesgos derivados del cambio climático, que cada vez afectan más a sus explotaciones, en 2025 la Consejería ha abonado más de 8,1 millones de euros en ayudas a la contratación de seguros agrarios, con un presupuesto total de 10,5 millones, el mayor importe hasta la fecha. “Además, quiero destacar que, en 2026, esta partida alcanzará los doce millones de euros, un 12,5 por ciento más, para reforzar la protección de las explotaciones”, ha asegurado el consejero.
Por último, Martínez Lizán ha puesto en valor el apoyo a la sanidad animal y a sectores específicos “que siguen siendo líneas esenciales de actuación”. Así, en 2025 se han destinado cerca de 8,2 millones de euros a las Agrupaciones de Defensa Sanitaria Ganadera (ADSG) y a ayudas relacionadas con la gripe aviar y la lengua azul. A ello se suman cerca de 54,4 millones de euros en otras líneas de ayuda, como el viñedo de secano, forestación, bienestar animal, fomento del pastoreo, zonas de montaña, Red Natura, recursos cinegéticos, prevención de daños del lobo ibérico, apicultura, aromáticas, protección de la avifauna, etcétera.
“En resumen, se trata de unas cifras que reflejan un compromiso firme, sostenido y creciente con agricultores y ganaderos, basado en el apoyo a la renta, la modernización de las explotaciones, la sostenibilidad y el desarrollo rural, con el objetivo de consolidar un sector primario fuerte, rentable y sostenible, respaldado por una industria agroalimentaria moderna, innovadora y competitiva, capaz de generar valor añadido, empleo y oportunidades en el territorio, garantizando así futuro para el campo y para el conjunto de la región, pues la gente se queda a vivir”, ha finalizado el consejero.
