Villamalea, en la comarca de La Manchuela, es ejemplo de convivencia e integración vecinal. Con algo más de 4.000 vecinos, el 25% de ellos inmigrantes, en Villamalea viven personas de 32 nacionalidades diferentes y esta semana su Ayuntamiento en Pleno, gobernado por el PP con representación también de PSOE e Izquierda Unida, ha aprobado pedir al Gobierno central la regularización de inmigrantes.
Este domingo, 10 de agosto, en el marco de sus fiestas de agosto, ha tenido lugar la Cabalgata intercultural donde también ha quedado patente la excelente relación entre sus vecinos, de nacionalidades tan distintas.
En el Pleno, su alcalde, el popular José Núñez, explicaba que la moción -que se aprobó por unanimidad- era la respuesta a una petición de las distintas organizaciones de Villamalea.
En el documento reconocían que de no ser por la población inmigrante faltaría mano de obra en sectores tan estratégicos como el champiñón o en el campo, para labores como la vendimia.
E incidían en que es de «justicia social» que se regularice su situación.
