El presidente de la Diputación de Albacete, Santi Cabañero, ha participado en Barcelona en la presentación del catálogo ‘Serzo vs Palencia: Preludio para una III Escuela de Vallecas’. Una obra de José Luis Serzo, en la que documenta su exposición del mismo nombre, expuesta en la Galería Marc Domènech hasta el 31 de octubre.
Junto al autor; al diputado provincial de Cultura, Miguel Zamora; a la alcaldesa de Barrax, Josefina Navarrete; a Marc Domènech, director de la Galería; a Alex Mitrani, conservador jefe de Arte Moderno y Contemporáneo del Museo Nacional de Arte de Cataluña; y a Miguel Palencia, en representación del Archivo Oficial de Benjamín Palencia, Cabañero ha señalado la “alegría” que supone acompañar a un paisano en una cita tan importante.
Y ha agradecido a la Galería Marc Domènech la acogida, “en el corazón de Barcelona, en el corazón del mundo del arte”, para hablar “de nuestra gente, de grandes artistas de Albacete, como Benjamín Palencia, que es nuestro pintor universal, y José Luis Serzo, uno de los artistas con más presente y futuro”.
Dos figuras que forman parte del mejor patrimonio cultural y artístico de nuestra provincia, pero también del país; dos albacetenses que han escrito y están escribiendo la historia del arte español, como valoraba Cabañero, subrayando el orgullo que esto supone para su tierra.
Durante la intervención, el presidente de la Diputación ha explicado que hoy no sólo se presenta un catálogo, “hoy estamos tejiendo puentes entre pasado y presente y también entre territorios”, y ha subrayado que este ejemplar, como ocurre con la exposición, custodia “una forma de dar a conocer al mundo una parte de nuestra esencia, de nuestra identidad, de nuestro arte y también de nuestra forma de ser y ver la realidad a través de la mirada de dos genios”.
Momento que ha aprovechado para recordar lo que la figura de Benjamín Palencia representa para Albacete, alabando también su generosidad al donar una parte de su obra, que está en el germen del Museo Provincial, y ha apuntado que “le debemos mucho, y estamos trabajando para que la Estación de Trenes Los Llanos, incorpore su nombre”.
Cabañero subraya el placer que supone colaborar con este proyecto
Del mismo modo, Cabañero ha tenido la oportunidad de felicitar a Serzo, ensalzando la potencia narrativa de sus creaciones, y explicando que “representa a la perfección el espíritu de la mancha, ese surrealismo inspirador”, al tiempo que ha destacado la importancia de este último proyecto no sólo para Albacete, sino para el arte.
“Probablemente, nadie a día de hoy pueda representar o actualizar la visión del mundo que tenía Benjamín Palencia, como lo puede hacer José Serzo”, ha afirmado el presidente de la Diputación, quien ha explicado que para la institución provincial es “un placer” colaborar con este catálogo y este proyecto, favoreciendo su edición y su difusión por Europa, América del Sur y EE.UU., promocionando el talento local dentro y fuera de nuestras fronteras.
De hecho, la institución colabora activamente en esta iniciativa, con una inversión cercana a los 10.000 euros porque, como ha indicado su máximo responsable, al dar ‘alas’ a ‘Serzo vs Palencia’ no sólo se da a conocer esta colección única y a estos artistas irrepetibles, sino que se enriquece el arte contemporáneo.
Y confiando en que la III Escuela de Vallecas que sueña Serzo esté cerca, Cabañero ha concluido sus palabras reafirmando el compromiso de su Gobierno con el arte y con los artistas locales para seguir transformando la sociedad a través de la cultura, y ha animado a los presentes a “ser, a partir de hoy, embajadores de nuestro arte”.
Una exposición, un diálogo entre genios
El catálogo, más de 120 páginas a color, condensa con maestría, elegancia y belleza, una exposición concebida como un diálogo íntimo y poético entre las obras, los paisajes y las inquietudes de Benjamín Palencia (Barrax, Albacete, 1894 – Madrid, 1980) y José Luis Serzo (Albacete, 1977). En este encuentro simbólico, el artista actual evoca la presencia de Palencia como una sombra tutelar a través de dibujos, pinturas, esculturas, algunas fotografías y una pieza audiovisual.
La muestra invita al espectador a emprender un viaje multidisciplinar a través de las conexiones y fricciones entre el pasado y el presente. Alejándose de cualquier rastro de costumbrismo o nostalgia paisajística, se plantea una relectura poética de la raíz como camino hacia lo universal, transformando el territorio en un espacio simbólico desde donde repensar el papel del arte, la periferia y la identidad en esta era de hiperconexión y disolución cultural.