El presidente de la Diputación Provincial de Albacete, Santiago Cabañero, ha declarado, este viernes en el juicio en el que está acusado de prevaricación administrativa, que no sabe «de quién partió la iniciativa» del cambio de jefe del Sepei. Ha aseverado que él en cuestiones de personal no ha entrado «más allá de la firma» que sí le corresponde como presidente. Y ha defendido que firmó el decreto para solventar el reparo que se puso desde Intervención al expediente porque así era «como llegaban la mayoría de documentos en ese momento».
Se ha referido incluso a los que así rubricaron los presidentes anteriores porque era una forma de «trabajar» en la institución.
Cabañero ha reiterado que era un documento firmado por la responsable en ese momento de Recursos Humanos y que si algo le llega de los técnicos competentes lo firma porque «le doy credibilidad».
«Firmé el decreto levantando el reparo, que decía que había un reparo por falta de documentación y poco más, pero es que es lo que pasaba habitualmente», ha insistido.
Ayer, el que fuera diputado del Sepei en ese momento, Juan Gil, declaró que el asunto del nombramiento del jefe del Sepei lo abordó con el entonces vicepresidente de la Diputación, Agustín Moreno, que había declarado un día antes en este mismo proceso.
El juicio ha quedado visto para sentencia. El Ministerio Fiscal mantiene para él la petición de 11 años de inhabilitación administrativa mientras que su defensa pide la libre absolución.