Por Carlos Garrido
El equipo de Chemi Escudero rozó la Tercera FEB por tercera vez consecutiva, en un año que el técnico califica de “notable” y que ha estado marcado por el compromiso y la unión del vestuario
El EBA ha completado una temporada para enmarcar en Primera Nacional, en la que no solo ha demostrado un juego de altísimo nivel, sino que ha vuelto a estar entre los grandes candidatos al ascenso a Tercera FEB. El equipo albaceteño, bajo la dirección de Chemi Escudero, alcanzó la Final Four y se quedó a solo un partido de culminar el sueño de subir de categoría, por tercera temporada consecutiva.
“Calificaría la temporada de notable”, señala el técnico. “Sabíamos que iba a ser un año duro, pero conforme avanzó la temporada, el nivel de exigencia fue aún mayor, ya que muchos equipos se reforzaron”. Tras un inicio dubitativo, el EBA firmó una segunda vuelta prácticamente impecable, con una sola derrota, y eso en la prórroga. “Nos marcamos como objetivo llegar hasta el final con opciones, y conseguimos jugar la Copa y la Fase de Ascenso. Ganar el partido del ascenso habría sido la guinda”.
Pese a esa espina final, el balance no puede ser más positivo. Escudero tiene claro cuál ha sido el gran pilar del equipo: “El compromiso. Sin ninguna duda. Al final competimos en un deporte amateur, y la unión y compromiso que han demostrado los jugadores, tanto dentro como fuera de la pista, ha sido excelente”.
En cuanto al contexto competitivo, el entrenador lo tiene claro: esta ha sido “la liga más dura” desde que está al frente del equipo. “A los proyectos consolidados como el nuestro o el de Grupo 76-Alcázar se han sumado los descendidos de Tercera FEB, como Daimiel o Bazu, con mayores recursos económicos. También Almansa, un histórico, y otros como CB Puertollano o Criptana, que se han reforzado con jugadores de altísimo nivel, incluso con internacionales por Mali. La competitividad y la seriedad de la liga han subido un par de peldaños”. Como punto a mejorar, reconoce que “se echan en falta más equipos de Albacete o provincia, sobre todo por los desplazamientos”.
A nivel personal, Chemi Escudero no oculta que el desenlace le deja una sensación “agridulce”. “Estamos contentos por haber sido segundos y haber jugado bien muchos meses, pero también jodidos, porque otra vez se nos escapa el ascenso en el día clave. Ese día no dimos nuestro mejor nivel, y esto es deporte. Hay que ser consecuentes”.
Por último, el técnico no se olvida de la afición, a la que dedica un mensaje de agradecimiento: “Muchas gracias a toda la gente que nos ha apoyado y seguido durante la temporada. Solo puedo animarles a que sigan viniendo por Parque Sur y respaldando a este equipo que ha demostrado, una vez más, que está hecho para competir con los mejores”.
