Seis meses después de descender a Segunda División en los despachos, el Elche sigue peleando aquella decisión y, según ha adelantado Onda Cero, el Elche ha reclamado 61 millones de euros a La Liga por los daños y perjuicios ocasionados por el descenso. Entre los daños enumeran perder el contrato de televisión en la máxima categoría, la fuga de jugadores que se marcharon gratis tras el descenso y el impacto económico que podría haber tenido para la ciudad y el club haber estado en Primera División esta temporada.
El club mantiene firme su idea de que la decisión se tomó de forma injusta porque antes del 30 de junio, el club ya estaba al día con la Agencia Tributaria. La Liga alegó que el Elche presentó el certificado positivo fuera de plazo y el Consejo que lideraba el presidente del Elche Juan Anguix tomó la decisión de demandar a la patronal de clubes. Anguix se marchó del Elche, pero el actual Consejo, encabezado con Juan Serrano, ratificó la decisión de la anterior directiva.