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El Sporting Albacete, un proyecto joven con ambición y un futuro prometedor

Por Carlos Garrido

El equipo, creado este mismo verano y ya instalado en la zona noble de Segunda Autonómica, nace con una hoja de ruta clara: crecer desde la cantera, consolidar una estructura profesional y aspirar a ascender cuanto antes

El fútbol albaceteño cuenta desde esta temporada con un nuevo actor llamado a tener peso en los próximos años. El Sporting Albacete, conjunto de reciente creación y actualmente competidor en el grupo I de Segunda Autonómica, se ha instalado en la zona noble de la clasificación pese a su corta trayectoria. Detrás del proyecto se encuentra un grupo de trabajo reducido, pero con experiencia, liderado por su presidente, Javier Imán, quien atiende a este diario para explicar el origen, la filosofía y el rumbo del club.

Martín aterrizó en Albacete hace poco más de tres años, pero su vida deportiva venía de lejos. “Yo vengo de ser presidente 8 años del Club Baloncesto Socuéllamos. He sido también vicepresidente del CV Kiele Socuéllamos Femenino y, en los tres primeros años de Segunda B del UD Socuéllamos, también fui directivo”, recuerda. Con ese bagaje y viendo que en la capital no existía otro equipo sénior aparte del Albacete Balompié, detectó un espacio sin cubrir: “Mucha gente que viene de fuera, a estudiar o trabajar, no puede practicar este deporte. De ahí surge un poco la idea.”

A partir de ahí, todo fue acelerado. Con la implicación de Mati, director deportivo, el Sporting Albacete se gestó en cuestión de semanas: “En agosto lo pusimos todo en marcha. Corrimos mucho para hacer el club desde cero: la junta directiva, los estatutos, darlo de alta…” Un inicio a contrarreloj que no ha frenado la ambición del proyecto.

Un plan a 15 años y la cantera como pilar fundamental

Pese a que el primer equipo es hoy la única estructura federada, la visión del Sporting Albacete va mucho más allá. “Hemos hecho un plan de equipo a 15 años vista donde la más importante es la cantera. El objetivo es formar el año que viene cantera. A partir de enero nos centraremos en ello, realizando eventos, campus, jornadas de captación… Queremos crear también un juvenil potente.”

El proyecto, subraya Imán, se construye sobre una idea clave: desarrollar el segundo club de la ciudad con un peso formativo real. “Vamos a apostar mucho por ello, haciendo entrenamientos de calidad, incorporando a buenos profesionales y marcando una línea de trabajo que cada año vaya dando sus frutos.”

Ascenso como meta del primer equipo

En lo deportivo, el Sporting no esconde su objetivo: pelear el ascenso desde el primer día. Y pese a las dificultades iniciales, el balance es positivo: “Ha sido muy complicado el comienzo, con muchas dificultades. Todo ha sido en tiempo récord. Hemos tenido que hacer correcciones en la plantilla y seguiremos haciendo. La valoración la doy por muy buena. Es un equipo de reciente creación, nuevo, y estamos ahí en la pomada para meternos en los puestos que dan derecho a pelear por el ascenso.”

El club, además, trabaja para fortalecer su estructura económica y social: “Seguir moviéndonos en medios de comunicación, establecer contacto con empresas y administraciones para conseguir los fondos necesarios, y dar difusión al proyecto.”

Un grupo de trabajo sólido y una ciudad que empieza a responder

Javier reconoce que su experiencia en Socuéllamos le ha marcado en la manera de gestionar clubes deportivos: “He aprendido que hay que rodearse de gente preparada, gente buena y que esté en la misma órbita que tú. Hemos acertado con el grupo humano. Es muy, muy bueno a nivel profesional y personal.”

El presidente afronta esta etapa con ilusión renovada: “Estamos en una ciudad que nos acaba de acoger, peleando y trabajando mucho para conseguir todos los objetivos, no solo a nivel deportivo, sino también de expansión de la marca. Estamos muy contentos con el trabajo realizado hasta ahora y planificando el futuro sin olvidar el presente.”

El Sporting Albacete ha nacido sin prisas, pero con un plan. Y mientras su primer equipo compite ya con ambición en Segunda Autonómica, en el horizonte asoma el verdadero sueño del club: convertirse en un referente deportivo y formativo dentro de la capital.