La Organización Mundial de la Salud señala a Campisábalos, en la Sierra Norte de Guadalajara, como el pueblo con el aire más limpio de España y el tercero del mundo. Sólo le superan Muonio, en Finlandia, y Norman Wells, en Canadá.
La contaminación atmosférica es el resultado de la acumulación en el aire de sustancias que resultan perjudiciales para la salud y que han sido generadas por la acción del hombre. Las partículas más dañinas son las de 2,5 micrones de diámetro –PM2,5- y las de 10 -PM10-, que pueden penetrar en el interior profundo de los pulmones y provocar graves enfermedades pulmonares. La OMS establece que las partículas de tipo PM2,5 no deben superar los 10 microgramos por metro cúbico de media anual y las de tipo PM10, los 20 para no suponer un riesgo para la salud. Mientras que en grandes ciudades como Madrid estos valores se rebasan repetidamente, en Campisábalos, las medias anuales son de 5 y 6 microgramos, respectivamente.
En Albacete, sin embargo, los parámetros suelen estar hasta 10 veces por encima de los de Campisalbos y, aunque no llegan a los niveles de contaminación en Madrid, sí se estima que la ciudad tiene un aire contaminado, especialmente en los días de mucho calor que se han dado este verano, como les contamos hace unas semanas en MasqueAlba, con datos de la Agencia de Calidad del Aire.
De hecho, este jueves 23 de agosto, día de tormentas, se han registrado hasta 81 partículas de PM10 en Albacete, con una calificación del aire como insalubre.