En esta ocasión no erraron los oráculos, el porcentaje de votos se correspondió con el de avales presentados y las previsiones se cumplieron, el resultado, pues que Habemus Paco. El almanseño fue ungido el pasado jueves por la militancia ‘popular’ como su nuevo presidente, y, además, lo fue por una amplia mayoría, lo que le otorga, todavía aún más, legitimidad suficiente para conformar la dirección que crea más conveniente para sus intereses y para los de su Partido, en el congreso regional que se celebrará el próximo fin de semana en Albacete. Ese que según dice el recién elegido presidente, servirá para elogiar la figura de la anterior presidenta y despedirla como mandan los cánones, lágrimas de cocodrilo incluidas.

Aunque hay costumbres que cuesta olvidar, y una vez vista la diferencia de votos, tampoco hacía falta que ningún peso pesado ‘popular’ repartiera a diestro y siniestro sobres con los votos para Paco en la puerta de la Calle del Muelle, porque, según me cuentan, nadie en el Partido, incluido el candidato Velázquez, dudaba que el resultado estaba cantado desde el mismo segundo en el que anunció su candidatura. Tanto es así, que ya tiene sucesor en la Alcaldía almanseña y la sombra de una gestora que asuma la dirección provincial popular hasta las Elecciones Municipales y Autonómicas del año próximo, ya sube las escaleras del número cinco de la Calle del Muelle. Todo atado y bien atado, como le gusta a la derecha.

La era Cospedal y sus nefastas políticas de austeridad mal entendida, por fin han concluido en nuestra Región y todo apunta a que su próximo destino político estará fuera de los límites de Castilla-La Mancha. No sabe bien Pablo Casado lo agradecidos que le estaremos la sufrida ciudadanía castellano-manchega. Sí la aleja, cuanto más mejor, de nuestra tierra. Una tierra a la que tanto daño hizo en tan solo cuatro años. Sinceramente, creo que nadie, salvo el grupo de corifeos que jalea cada paso que da, la echará de menos, y la comunidad educativa y sanitaria menos que nadie. 

Las credenciales del flamante presidente ‘popular’ tampoco es que sean para tirar cohetes, porque a pesar de su juventud y con su máster en Gobierno y Administración Pública a cuestas, ya pasea por los pasillos del Convento de San Gil, sede de las Cortes de Castilla-La Mancha, una pesada mochila cargada con la tomadura de pelo a la ciudadanía almanseña con el fiasco de Gibacars, con su visión decimonónica y antediluviana del papel que juegan las mujeres en el devenir cotidiano de nuestra sociedad o con su defensa a ultranza de la privatización de los hospitales de Almansa o Villarrobledo, por citar tan solo unas pocas cuentas del rosario de acciones controvertidas que ya colecciona el nuevo sumo hacedor ‘popular’ en nuestra Región.

En lo personal le felicito por el éxito alcanzado, pero en lo político, me va a perdonar, pero lo que le deseo es que asuma con naturalidad ser el portavoz de la oposición en el próximo Parlamento Regional. A diferencia de él, que  reza para que Podemos desaparezca del mapa político regional, yo no quiero que el PP pierda su representación en el Convento de San Gil, me conformo con que no sea suficiente para formar gobierno, porque creo que todas las visiones políticas son necesarias para contraponer, para comparar, para contrastar, para avanzar y para no olvidar, que hay quien piensa diferente y puede que hasta lleve razón. En eso consiste la democracia, querido Paco, que a veces se nos olvida que el pensamiento único solo es posible en los regímenes fascistas y totalitarios.

Ahora que ya es presidente y que no tiene que hacer mérito alguno para destacar y llamar la atención, igual se arrepiente del día en que sacó la lengua a pasear y llamó terroristas y amigos de los terroristas a algunos miembros del Gobierno Regional. Un exceso verbal y una salida de tono que dice muy poco de él y que lo sitúa en las antípodas del partido moderno y pegado al terreno que dice querer. El tiempo dirá si se trató solo de una escaramuza para conseguir un titular fácil, o sí por el contrario, nos encontramos ante una forma de ser, de actuar y de hacer política, que bien se merece estar guardada a buen recaudo en el baúl de las estupideces, junto con los micrófonos de ambiente de un comisario encarcelado por cohecho, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal.

Quiero pensar que la renovación ‘popular’ que pregona Paco, lo sea también de las formas y en los talantes, porque es lo que se les ha prometido y lo que han votado los y las militantes ‘populares’. Pero sí lo que se esconde tras esas promesas de renovación, es aplicar solamente un poco de chapa y pintura que maquille y rejuvenezca la vieja carrocería popular, arreglados estamos. Y que conste, que la mosca detrás de la oreja la tienen más de cuatro, y no lo digo yo, lo piensan y lo dicen, de momento con la boca pequeña, aquellas personas a las que no les gusta cómo se ha comportado hasta ahora el amigo Paco. Yo solo me limito a trascribrirlo en papel, que en ese entierro tengo poca vela.

Como dijo el sabio, la clave está en darle tiempo al tiempo, él se encargará de poner todo en su lugar. Pues eso.