Cuando un accionista cuestionó porque Globalcaja pagaba 300.000 euros por temporada por la publicidad en la equipación del Alba e Iniesta había comprado acciones por 420.000 euros y se le habían dado tres años de publicidad, fue el propio José Antonio Iniesta quien tomó la palabra, se bajó al centro del auditorio y explicó que ayudó al Alba porque así se lo pidieron sus entonces responsables “un día que estaba tranquilamente en mi bodega”.
“Les di lo que me pidieron y ellos me dieron las acciones” pero asegura que “les dije que si alguien quería la publicidad y pagaba por ella no tenía problemas en quitarla”. Volvió a instar a que quien quiera ponga 40.000 o 60.000 euros “y mañana mismo la pone”.
Defendió la ayuda que ha dado al Alba –que cierto es que el club sigue vivo hoy por la Familia Iniesta, aunque al padre le hayan fallado las formas en más de una ocasión, como reconoció un día antes-, y detalló que su hijo cobra un millón de euros por cuatro horas de publicidad, si bien las campañas que ha hecho para ayudar al Alba “no ha cobrado ni un euro”.
