Israel Bascón reconocía que no había sido el día del Alba, aunque también aludía a los errores arbitrales. Así, valoraba que «en la primera parte podíamos haber dado más, pero hemos hablado en el descanso y en la segunda hemos mejorado. Ves que el equipo empuja, que tenemos ocasiones y que se estrellan en el palo y te vas desesperando».
Aseguraba, además, que el colegiado no había estado nada bien: «el árbitro ha estado fatal, nos han hecho dos penaltis, el primero de ellos clarísimo, y luego nos ha cosido a faltas y a tarjetas, todo esto te desconcierta».
«Ha sido una derrota muy dolorosa porque no deja de ser contra el colista», reconocía.
Por su parte, el guardameta Dorronsoro valoraba que «se han dado todos los ingrediente para no ganarles. No hemos estado afortunados. En la primera parte no hemos estado finos ni lo suficientemente enchufados y ellos han aprovechado su oportunidad. Después ha resultado muy difícil y tampoco nos acompañó la fortuna».
Dorronsoro aseguraba que no habían salido confiados: «sabíamos que iba a ser difícil porque es un filial con mucha calidad, en el que los jugadores están muy bien físicamente. No ha habido exceso de confianza porque sabíamos que el Cádiz había empatado aquí y que era un campo complicado».