El presidente del Albacete Balompié, José Miguel Garrido, acompañado del vicepresidente, Santiago Pozas, y de varios de los consejeros, ha celebrado esta mañana un desayuno con los medios de comunicación en el que ha realizado balance de los primeros 50 días de su gestión al frente del club.
Ha subrayado que cree que se ha conseguido la estabilidad en estos primeros 50 días y ello pese a que se encontraron un club con las cuentas embargadas, donde no podían pagar en los primeros días de inmediato porque si ingresaban el dinero no podían hacer uso del mismo, al estar las cuentas en dicha situación.
Entre las gestiones que han realizado, además de pagar varias nóminas a la primera plantilla, cuerpo técnico, responsables de las categorías inferiores y trabajadores, ha recordado que han renegociado el convenio con CMT, por el que se han conseguido 80.000 euros –sin incluir los play off- para esta temporada y ha detallado que este, por ahora, es el único ingreso que ha llegado. Ha reconocido Garrido que el resto de clubes de la categoría en la región se han aprovechado de esta renegociación al alza del Alba y que se lo han agradecido.
En publicidad llegan entre 2.000 y 4.000 euros a las arcas del club cada mes y las taquillas de los partidos dan para pagar a los árbitros, con lo que Garrido ha advertido que “cuesta dinero abrir el Carlos Belmonte”.
El término de las negociaciones con Astore para que pudieran llegar las equipaciones definitivas fue otra de sus gestiones. Ha detallado que Astore lo que quería era cobrar y que lo está haciendo, como el resto de los acreedores actuales, ya que si no difícilmente sirven a un club en esta situación. De la equipación ha explicado que se dio prioridad a la del primer equipo, después las camisetas para vender a la afición –que estarán a la venta este fin de semana- y en tercer lugar a las categorías inferiores, que intentarán que estén a partir de enero.
De la situación extradeportiva ha detallado que tienen pendientes 30 demandas por lo que analizan cómo ir resolviendo la situación. Eso sí, ha dejado claro que pese a esto “nadie se va a llevar a un jugador por un plato de spaguetti por mucha falta que nos haga el plato”.
Ha reconocido estar sorprendido por el sentimiento que el Alba despierta en las instituciones y de otras situaciones a resolver ha detallado que, una vez que se ha llegado a un acuerdo con los trabajadores –ha recordado los tres despidos que hubo- toca negociar con Hacienda y la Seguridad Social, aunque ha confiado en que “va a ir bien”.
Otros acreedores importantes son una entidad bancaria y la Familia Iniesta, aunque de éste último ha detallado que está convencido de que cobrará poco a poco en Segunda y que si se desciende deja de cobrar.
Ha recordado que la viabilidad del club pasa principalmente por el ascenso, ya que en Segunda llegarían unos 5 o 6 millones de ingresos y se pueden competir con 3 o 4, pero no en Segunda B y con una deuda de más de diez millones de euros. Ha detallado que otros clubes, en esta categoría, cuestan 400.000 euros con todo.
Sobre la Asamblea de este domingo, y a preguntas de los medios, Garrido ha explicado que no incluyeron el apartado de ruegos y preguntas en el orden del día por un ‘despiste’ pero que por supuesto que contestarán a todo lo que quieran saber los accionistas del club.