Gesto poco deportivo el que se veía en el Carlos Belmonte al terminar el partido de Copa. Todo el público estaba muy cabreado con las decisiones del colegiado del encuentro, José María Sánchez Martínez, aunque llegaba un gesto denunciable. Un aficionado, desde Gol Norte, lanzaba una botella de agua al árbitro. No le daba, pero el linier la ha cogido y se la ha llevado.
La Policía Nacional les escoltaba camino del túnel de vestuarios, cuando la botella caía, como se puede apreciar en esta imagen.
El colegiado recogía después, en su acta del partido, el hecho de que se había lanzado una botella de agua desde la grada.
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En el acta, Sánchez Martínez señalaba que «cuando nos dirigíamos al vestuario, nos fue lanzada una botella de agua de medio litro medio llena y cerrada desde la grada de fondo donde se encuentra el túnel de acceso a vestuarios» y explica que la botella «pasó cerca mía pero sin llegar a impactar en nadie» y que así lo trasladaron al delegado de campo en el Carlos Belmonte.
Además, también detalla que ha expulsado al guardameta del Alba Rosic, al terminar el encuentro, por decirle que «esto es una puta vergüenza».
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