El nivel de los contribuyentes con mayor poder adquisitivo de Castilla-La Mancha ha caído hasta en un 80% en la región, pasando de 196 personas que declaraban más de 600.000 euros en sus ingresos anuales a solamente 37 en la última declaración, según los datos facilitados por la Agencia Tributaria al cierre del ejercicio de la Renta de 2013.
Así, el descenso ha sido del 80% en los últimos cinco años, de los considerados ricos.
Del mismo modo, descendieron los dos siguientes tramos, entre los que se encuentran las personas que ingresan de 600.000 a 150.000 euros —de los que se han perdido casi un millar de personas— y los contribuyentes comprendidos entre los 150.000 y 60.000 euros, que pasaron de ser 19.350 hace cinco años a 14.821 el año pasado, un 23% menos.
Los expertos atribuyen esta situación a la pérdida de ingresos generados por la crisis inmobiliaria y al descenso de los resultados empresariales. De hecho, los contribuyentes con mayores ingresos son empresarios, profesionales liberales y rentistas.
En la mayoría de la población, la denominada clase media no se han notado unas diferencias tan destacadas como en la clase alta, considerando clase media a los contribuyentes que se encuentra en los baremos salariales de 30.000 a 12.000 euros anuales. En 2009 se sittuaban este tramo 387.418 personas y el año pasado bajó la cifra a 368.245.