Por Carlos Garrido
El conjunto dirigido por Víctor Peinado logra el salto de categoría tras una temporada impecable y lo celebra por todo lo alto con su afición
El CFS Minaya ya es equipo de Preferente y lo ha conseguido a lo grande: sin perder un solo partido en todo lo que va de temporada. El conjunto albaceteño selló el ascenso este pasado fin de semana tras vencer en casa al filial del Albacete FS (3-0), una victoria que le permitió mantener el liderato del grupo I de Primera Autonómica después de 28 jornadas. El balance, simplemente espectacular: 23 victorias y 5 empates.
A falta aún de un par de jornadas para que finalice la fase regular de Liga, los de Víctor Peinado han hecho historia en Castilla-La Mancha, convirtiéndose en uno de los equipos más sólidos y regulares del panorama regional. Su dominio ha sido tan claro como merecido, y el ascenso es el premio a una trayectoria marcada por el trabajo, la constancia y el compromiso de un bloque que ha funcionado como una auténtica familia.
La alegría se desató en Minaya el pasado miércoles, cuando el pueblo entero se volcó en una celebración improvisada pero muy sentida. Jugadores, cuerpo técnico y aficionados compartieron una rúa histórica por las calles del municipio, con los futbolistas subidos a un remolque que recorría las avenidas principales mientras la afición coreaba y celebraba el ansiado ascenso.
Minaya ya es de Preferente, y no por casualidad. Ha demostrado ser uno de los clubes que mejor ha hecho las cosas esta temporada en el deporte castellanomanchego, tanto en lo deportivo como en lo humano. Un ejemplo de proyecto sólido, arraigado en su pueblo, que ahora empieza a soñar con nuevos retos en una categoría superior.
