“Hoy vamos a votar un documento por el que va a ser aún más irreversible el proceso autonómico, va a ahondar aún más en nuestra propia capacidad y, por todo ello, gracias de corazón”. Con estas palabras ha comenzado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, su intervención, hoy en las Cortes regionales, para defender el texto de la Proposición de Ley de Reforma del Estatuto de Autonomía que se ha aprobado con el consenso de los dos grupos mayoritarios en la Cámara regional.
“Hoy es un día trascendente porque legitimamos el proceso que hace ya décadas empezó en la Constitución Española, renovamos, en definitiva, nuestro compromiso con esta tierra”, ha apuntado, destacando, a su vez, “el proceso de escucha que se ha prolongado durante meses, un proceso minucioso de tanta y tanta gente que ha podido aportar”. Ese proceso ha sido, a juicio del presidente, “la tarjeta de presentación de esta tierra, porque aquí las cosas se hacen de otra forma y afortunadamente ha sido muy útil”.
En opinión del presidente regional, el cambio que va a experimentar el texto del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha es “leal con España”, frente a quienes “han cambiado los estatutos de Autonomía para tener más que el resto, para garantizarse privilegios e incluso para poner en cuestión el propio modelo constitucional. Hay gente que ha utilizado los estatutos de Autonomía como armas arrojadizas para reinterpretar la voluntad del Constituyente del 78. No es nuestro caso. No ha sido nunca nuestra intención”, ha rubricado.
En este orden de cosas, ha señalado que a “estas cinco provincias que llamamos Castilla-La Mancha” nunca les ha ido tan bien como desde que “tenemos autonomía política para gobernarnos a nosotros mismos”. A este respecto, ha señalado que todas las competencias que hemos ido asumiendo: sanidad, educación, prestaciones sociales o dependencia, han sido útiles a los intereses de los ciudadanos”.

Ni un paso atrás
Para Emiliano García-Page “el sentimiento que ha florecido en la región es regional, no independentista ni nacionalista, no es un sentimiento antiespañol, al contrario, refuerza la españolidad de esta tierra”. Del mismo modo, ha subrayado que “no va a haber un solo paso atrás” en el proyecto de Castilla-La Mancha y que éste es un paso de una región “que mira con limpieza y que es coherente, sencilla, no digo pobre, e incluso diría que austera”.
El jefe del Ejecutivo regional ha defendido que España se hace más grande desde una cooperación leal desde los distintos territorios y que el hecho de que la Constitución otorgara al resto de los territorios los mismos instrumentos que a los territorios históricos “ha sido una gran aportación a la unidad de España”. “Somos nosotros los que no permitiremos nunca privilegios de otros territorios”, ha dicho.
Región en expansión
“Hoy ésta es una región en expansión, en crecimiento, que tiene retos por delante. Y no son retos de ir para atrás, son retos de gestionar el propio éxito de la Comunidad Autónoma. Este es un instrumento que nos prepara para gestionar y hablar realmente de lo que le importa a la gente”, ha apuntado García-Page, seguro de que esta región da hoy “un salto adelante con mucha limpieza, con mucha serenidad y dando ejemplo en España”.
El jefe del Ejecutivo castellanomanchego ha presumido del trabajo hecho y ha argumentado que las modificaciones llevadas a cabo en el Estatuto de Autonomía “nos reafirman como una región en la centralidad, no solo en el centro de España, no sólo en el corazón de este país, sino también en la centralidad que es hoy el ejemplo que estamos dando de poder pactar”.
En alusión a este “pacto ejemplar”, García-Page ha confesado que lucha “sobre todo contra el populismo, sea de izquierdas o de extrema derecha”, porque “el populismo, como la demagogia, tiene, como las mentiras, las patas cortísimas”. Así mismo ha reconocido que los dos partidos mayoritarios en el Parlamento regional “tenemos claro que hay intereses que están muy por encima de nuestros propios partidos, que estamos al servicio de la gente y no al revés, la gente a nuestro servicio”.
A partir de este momento, el nuevo texto tendrá que ser defendido en el Congreso de los Diputados “y ahí tenemos todos una responsabilidad”, ha apuntado el mandatario regional, “porque el contexto nacional no va a ayudar mucho a un debate sereno, a lo mejor puede ser que este sea el único elemento de consenso entre PSOE y PP en España. Ya solo por eso merecería la pena”, ha matizado.

Las personas comisionadas por las Cortes de Castilla-La Mancha que presentarán y defenderán la Proposición de Reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha ante el Congreso de los Diputados serán tres diputados autonómicos: el presidente regional, Emiliano García-Page; el diputado regional por el PP, Francisco Núñez; y la diputada regional por el PSOE, Ana Isabel Abengózar.
“Estamos dispuestos a que Castilla-La Mancha siga dando ejemplo. Damos ejemplo de algo que hoy avalamos y confirmamos. No somos los mejores, no somos los más listos, no queremos tener privilegios, no vamos a admitir nunca tener menos, pero en el día de hoy, tal y como está España, yo firmaría para que el conjunto de este país viera cómo funcionamos, cómo trabajamos y cómo nos entendemos en esta tierra”, ha dicho el presidente de Castilla-La Mancha para finalizar su alocución.
NÚÑEZ VE UN NUEVO TIEMPO
El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha afirmado que el nuevo Estatuto de Autonomía “llega tras 40 años de gestión socialista” y abre un nuevo tiempo para el cambio en Castilla-La Mancha.
Así lo ha indicado durante su intervención en el pleno de las Cortes regionales, donde ha incidido en que es un “nuevo tiempo alejado de la radicalidad” para abrir paso a un tiempo “centrado en la gente de Castilla-La Mancha”.
“Creo en los castellanomanchegos, creo en esta tierra y creo en sus posibilidades”, ha dicho, por lo que “creo que este nuevo Estatuto de Autonomía es la mejor forma de dar futuro y oportunidades a la Castilla-La Mancha del siglo XXI”.
Núñez ha incidido en que este nuevo texto moderniza la región y sirve para aprovechar las herramientas para avanzar más rápido y “hacerlo juntos” para mejorar la sanidad, la educación, dar oportunidades a los jóvenes, proteger a los mayores, creer en la infancia y la adolescencia, luchar por una sociedad inclusiva y ofrecer un “tiempo nuevo” de oportunidades para todos “independientemente de donde vivan”.

“El nuevo Estatuto es una venta de cambio que se abre en Castilla-La Mancha, que reafirma el compromiso del PP con el Estado de las Autonomías, así como con la España constitucional y con el autogobierno regional”, ha añadido.
El presidente del PP-CLM ha celebrado que este nuevo Estatuto de Autonomía no solo nace del consenso de los dos grandes partidos, sino del consenso con la sociedad civil castellanomanchega. “Yo hoy llego a un acuerdo con el conjunto de los castellanomanchegos, legítimamente representados en sus asociaciones y colectivos, para firmar con ellos y aprobar con ellos un nuevo Estatuto de Autonomía, porque es del ellos el éxito del mismo”, ha aseverado.
Núñez ha indicado que la política fiscal que defiende el PP es “radicalmente distinta” a la del PSOE, porque el PP quiere “bajar los impuestos y el PSOE no lo hace”. Además, el PP quiere mejorar la gestión sanitaria, recuperar la Carrera Profesional Sanitaria, mejorar la política social de la región y el PP cree en los agricultores, en los ganaderos, en la rentabilidad de las explotaciones, en la incorporación de los jóvenes al campo y en la flexibilización de la PAC. “Y esto el PSOE no lo hace”.
DIÁLOGO SOCIAL
Se trata, ha continuado, de un Estatuto que está elaborado “dando mucho protagonismo al dialogo social”, porque este texto “habla de la participación, de la igualdad, de la libertad, de la accesibilidad”, que además “blinda los derechos y los servicios con carácter general, sin exclusiones, con la integración de todos”, así como el agua para los castellanomanchegos en el marco de un Pacto Regional por el Agua que ya está firmando y que Page no ha trasladado a Moncloa para alcanzar un Pacto Nacional.
“Estamos orgullosos de nuestro Estado de las Autonomías y de una relación de ‘tú a tú’ con cualquier otra comunidad autónoma, sin ser más que nadie, pero sin ser menos que nadie”, ha asegurado.
Además, el nuevo Estatuto de Autonomía es “municipalista”, ya que protege a las entidades locales y reconoce realidades de la región como son las áreas metropolitanas, así como a los pequeños municipios y atiende una demanda histórica como es el reconocimiento de las Tierras de Talavera.
Por último, Núñez ha señalado que este texto abre la puerta a un nuevo reglamento en las Cortes de Castilla-La Mancha, al tiempo que ha destacado la “mala noticia” para Emiliano García-Page y para David Moreno y es que “no habrá aumento de diputados en las elecciones de mayo de 2027, ya que se votarán 33 diputados como en la actualidad”. Además, el Estatuto elimina los aforamientos a los parlamentarios autonómicos.
CABAÑERO VALORA EL NUEVO TEXTO
El presidente de la Diputación de Albacete, Santi Cabañero, ha mostrado su satisfacción y “profundo orgullo” tras la aprobación en las Cortes del nuevo Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha, que ha calificado como “una herramienta valiente, transformadora y profundamente democrática que pone en el centro a los pueblos, a su gente y a su dignidad”.
Desde Toledo, ha querido comenzar su valoración con una felicitación colectiva: “Hoy es un día feliz, importante e incluso diría que histórico para Castilla-La Mancha. Felicito a toda la ciudadanía porque hemos asistido a la aprobación de un nuevo marco de convivencia que mejora la calidad democrática y acerca, más que nunca, a representantes y representados”.
Cabañero ha valorado muy positivamente tanto el contenido como el proceso de esta reforma: “Me gusta la música de este Estatuto. Me gusta la coreografía. Y me gusta que se baile juntos”, ha dicho en alusión al amplio respaldo político logrado. “Que se haya aprobado por una mayoría amplia de los dos grandes partidos de nuestra región, aporta estabilidad y demuestra que este Estatuto viene para quedarse y para durar”.

La mirada municipalista, protagonista
Como presidente de la Diputación y “como representante del mundo local de esta región”, ha destacado el papel que el nuevo texto otorga a las entidades locales: “Me gusta que se reconozca al municipio en los términos que recoge el Pacto Local, que tanto tiempo llevamos reivindicando los municipalistas. Me gusta que se apueste por una relación horizontal entre administraciones, basada en el respeto y la colaboración real”.
Especial mención ha hecho al hecho de que se contemple la creación de un Estatuto del Pequeño Municipio, que reconoce “la necesidad de una legislación diferenciada para realidades que son diferentes”, permitiendo adaptar mejor la gestión pública a las necesidades de cada territorio.
Igualmente, ha valorado el reconocimiento de la comarca como figura territorial clave, destacando que “muchas veces ha sido olvidada, cuando es esencial para identificar realidades vivas que no siempre son reconocidas como merecen”.
También ha subrayado el acierto de regular mancomunidades y entidades locales menores, dotando de seguridad jurídica y estabilidad a fórmulas de cooperación que ya funcionan eficazmente sobre el terreno.
Despoblación, igualdad y justicia territorial
Cabañero ha hecho hincapié en el Título VI del Estatuto, que consagra el desarrollo rural y la lucha contra la despoblación como retos estructurales y prioritarios. “Ya no se trata como un problema aislado, sino como un reto de Comunidad Autónoma que exige políticas claras, recursos y mirada larga”.
Desde una perspectiva profundamente humanista y democrática, ha señalado también otros aspectos especialmente destacables del texto: “Me gusta que este Estatuto hable de diálogo social como obligación, no sólo de concertación; y que cualquier cambio normativo tenga que contar con la sociedad organizada, además de con los partidos políticos”.
Finalmente, ha puesto en valor la apuesta por la igualdad de oportunidades, tanto entre quienes viven dentro y fuera de la región, como entre quienes habitan el mundo rural o urbano, o tienen diferentes niveles de renta: “Esta Comunidad nunca ha pedido ser más, pero tampoco ha tolerado nunca ser menos. Que todos tengamos las mismas oportunidades, vivamos donde vivamos, es lo que este Estatuto garantiza mejor que nunca”.
También ha destacado el compromiso claro con la igualdad de género y la lucha contra la violencia de género, contemplados como deberes permanentes del Gobierno autonómico, independientemente del color político que lo lidere.
Un reconocimiento colectivo
Para cerrar, Cabañero ha expresado un “agradecimiento sincero y sentido” a todas las personas, entidades, colectivos y organizaciones que han contribuido a este proceso: “A quienes se han dejado la piel para que hoy estemos aquí. Y, sobre todo, a la ciudadanía de Castilla-La Mancha, cuya dignidad, bienestar y futuro han sido, son y seguirán siendo la razón y el motor de este nuevo paso adelante que damos como Comunidad”.