Esta mañana han tenido lugar en las Oficinas de Extranjería de las cinco provincias de Castilla La Mancha paros de 12:30 a 14:30 horas, acompañados de concentraciones. El motivo es denunciar la ya de por sí complicada situación en la que se encuentran por la falta de personal, que se va a ver agravada a partir de mañana con la entrada en vigor del nuevo Reglamento.
A la sobrecarga de trabajo que ya están soportando en las Oficinas de Extranjería por la cantidad de plazas que están sin cubrir (6 en Toledo, 10 en Guadalajara, 9 en Cuenca, 5 en Ciudad Real y 1 en Albacete), hay que sumar el significativo aumento de expedientes que el nuevo Reglamento de Extranjería va a generar.
Este es el motivo de las huelgas convocadas para hoy en todo el país, tal y como han apuntado representantes de CCOO de la FSC de Castilla La Mancha de las di-ferentes provincias durante las concentraciones en las puertas de las Subdelegacio-nes del Gobierno, lamentando que el cambio de Reglamento se produzca sin que por parte del Ministerio se haya resuelto el problema que, no sólo afecta a volumen de trabajo, sino también a las retribuciones del personal que atiende las Oficinas.
Tal y como han explicado, “tenemos plantillas de 2006, cuando había un 62% menos de personas extranjeras, y además el 30% de los puestos de trabajo están vacantes, porque muchas personas, después de estar un tiempo en estas oficinas acaban yéndose se van a organismos con mejores condiciones, como puede ser el SEPE, la Seguridad Social o la Agencia Tributaria”.
Pero además, a esto hay que añadirle la falta de formación del personal, ya que fue hace seis meses cuando se acordó la reforma del Reglamento y su entrada en vigor el 20 de mayo, pero la formación de los empleados y empleadas no se ha hecho hasta hace apenas un semana y las instrucciones llegaron el pasado martes”.
La solución de las 8 personas interinas que se van a incorporar en Castilla La Man-cha (1 en cada provincia y 3 más en Toledo) no soluciona el problema porque esas personas tienen que ser formadas y no hay margen ante el aumento de demanda de trámites que va a haber a partir del mañana por los cambios que introduce el nuevo Reglamento. A modo de ejemplo de las novedades que se introducen en la legisla-ción, cabe destacar que el arraigo social se podrá solicitar con dos años de estancia en España en lugar de los tres de antes, lo que va a provocar más solicitudes; y también desaparece el plazo de dos años para solicitar el asilo en España cuando esa solicitud ya ha sido denegada antes, cuestión también que va a llevar a muchas personas a pedirlo.
Con estas movilizaciones, la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO Castilla La Mancha reclama la contratación urgente de personal para cubrir todas las plazas vacantes, mejoras salariales y condiciones dignas para el personal, y que se modifique el sistema de gestión de expedientes para evitar bloqueos y retrasos.
Actualmente, en las oficinas de Castilla-La Mancha hay 53 personas funcionarias, cuando debería haber 32 más: Toledo, 12 personas trabajando y 6 plazas vacías; Guadalajara, 6 personas trabajando y 10 puestos vacíos; Cuenca, 9 personas traba-jando y 9 plazas vacías; Ciudad Real 11 personas trabajando y 5 puestos vacíos; y Albacete, 16 personas trabajando y 1 plaza vacía.
Respecto al volumen de trabajo, indicar que en 2024 se resolvieron 43.347 expe-dientes, siendo Toledo la provincia con mayor número de expedientes (16.610) por-que es donde reside la mayor población migrantes, seguida de Guadalajara (8.011 expedientes), Albacete (7.723), Ciudad Real (5.870) y Cuenca (5.133).
La falta de personal ha derivado en serías dificultades para cumplir con los plazos legales establecidos en los trámites de regulación administrativa, y prueba de ello es que los tiempos medios de respuesta han aumentado, sobre todo en Toledo que en el último años han pasado de 41 días hábiles a 62, o en Cuenca donde los 42 días se han convertido en 52.
Esta demora se va a acentuar a partir de mañana prolongando la situación irregular en la que se encuentran muchas personas inmigrantes que sufren una situación de vulnerabilidad.