La portavoz del Grupo Municipal Socialista, Amparo Torres, ha expresado su preocupación por el hecho de que Manuel Serrano haya decidido volver a “aplicar en el Palacio de Congresos su doctrina de dejar que las cosas se arruinen por sí solas”, puesto que en la Comisión Informativa de Hacienda, Contratación, Seguridad y Régimen Interior, que se celebrará mañana, se dictaminará el acuerdo de la Junta de Gobierno Local (JGL) para revocar la ejecución subsidiaria de deficiencias en el Palacio de Congresos y Exposiciones.
En la práctica, esta decisión, ha explicado Amparo Torres, “condena al Palacio de Congresos al abandono, mientras se deteriora inexorablemente, cada vez que se producen precipitaciones intensas en nuestra ciudad. Tenemos en la retina las imágenes del Palacio de Congresos plagado de cubos y moquetas extendidas para absorber el agua que se filtra desde la cubierta o los anuncios de cancelación de espectáculos. Tras la decisión de Manuel Serrano, esta será la imagen de las instalaciones, cada vez que llueva en Albacete”.
Circunstancia que nada tiene que ver, ha precisado la portavoz municipal socialista, “con la imagen que pretende proyectar Manuel Serrano sobre sus prioridades y acción de gobierno. Especialmente, cuando llega la Feria Internacional de Turismo, Fitur, ocasión en la que afirma convertir en una prioridad «mostrar al mundo entero nuestros grandes atractivos turísticos», como aseguró literalmente en su última edición”.
Otro tanto ocurrió en la pasada campaña electoral, incide Torres Valencoso, cuando “se comprometía a recuperar la actividad en el Palacio de Congresos, para revitalizar el turismo, pero cuando tiene la responsabilidad y la posibilidad de hacerlo, si se le presenta un problema complejo, que exija trabajo e implicación, la respuesta siempre es la misma, mirar hacia otro lado, aguardar a que un tercero le solucione el problema y en última instancia, dejar que las instalaciones se arruinen, para no tener que hacer ya nada”.
Este planteamiento, tal y como ha subrayado Amparo Torres, “no es nuevo ni la única vez que lo han empleado el PP y Manuel Serrano en nuestra ciudad. Ocurrió con los Depósitos del Agua de la Fiesta del Árbol (actual Ciab); está ocurriendo con la antigua sede del Banco de España; sucede con el refrescante del Parque y sucedió también en el chalet Fontecha. Todos estos ejemplos tienen un denominador común, recuperarlos exigía esfuerzo para llevar a cabo un proyecto o solucionar un problema complejo, y al frente del Gobierno de la ciudad u ocupando un lugar destacado en él, estaban Manuel Serrano y el PP”.
El Ayuntamiento decidió actuar subsidiariamente
En el caso que nos ocupa, el Palacio de Congresos, los problemas se originan en 2021, cuando técnicos municipales detectan deficiencias en su cubierta, que de no corregirse, además de las filtraciones en el interior cada vez que llueve, irían agravándose con el paso del tiempo.
Dado que, tal y como precisa la concejala socialista María José López Ortega, “el palacio es una concesión administrativa, el Ayuntamiento requirió a la empresa que actuara para solventar estas deficiencias. En octubre de 2021, el Ayuntamiento, ante la falta de respuesta de la empresa adjudicataria, decidió actuar y ejecutar las obras de reparación de forma subsidiaria, para posteriormente, reclamar a la concesionaria el importe de las actuaciones”.
De hecho, añade López Ortega, en septiembre de 2023, se adjudicó el contrato de redacción del proyecto técnico para reparar la cubierta y el exterior del Palacio de Congresos, por 72.600 euros. Pero ahora, Manuel Serrano ha decidido que el Ayuntamiento no ejecutará estas obras de forma subsidiaria, por lo que el proyecto se quedará guardado en su cajón, el dinero invertido despilfarrado y lo más grave, el Palacio de Congresos agravando sus daños y deterioro”.
Una situación, argumenta la concejala socialista, que “caracteriza a un alcalde irresponsable, pues tanto el Palacio de Congresos como el hotel anexo, forman parte del patrimonio municipal, y una vez que se resuelva el litigio entre la
empresa adjudicataria y el Ayuntamiento, para resolver la concesión, el Ayuntamiento tendrá que volver a licitar las instalaciones. La conclusión es sencilla, llegado este momento, podemos encontrarnos en la situación de tener la titularidad de un palacio arruinado, con una inversión inasumible, para hacer viable su licitación y que cumpla su cometido, acoger eventos y fomentar el turismo de congresos”.
Paralelamente, concluye López Ortega, “el señor Serrano inaugura hoteles de titularidad privada, mientras abandona el propio; se presenta en Fitur, para decir que el turismo es imprescindible para la economía de la ciudad, pero no hace nada, cuando tiene en sus manos recursos con un gran potencial para atraer visitantes a nuestra ciudad, como el propio Palacio de Congresos o el Banco de España, para el que existía un proyecto para convertir a nuestra ciudad en referente del arte realista. Por lo que solo cabe preguntarse si actúa así por hipocresía o necedad, o la suma de ambas”.