El presidente del Rayo, Raúl Martín Presa, indicaba que: Es una noche muy triste para el Rayo y el deporte. Condenamos tajantemente los insultos que una parte de la afición del fondo norte han dedicado a un jugador.
Lo condenamos, son parte de los insultos que llevo tiempo sufriendo, la gente mira a orro lado y hemos llegado a que un deportista no pueda desarrollar su profesión.
Bajé al vestuario, ofrecí al árbitro y la directiva desalojar el estadio, hablaron con la coordinadora de seguridad pero no lo estimó oportuno y se acordó suspender.
Lo condenamos y estamos avergonzados.
En todo momento hemos pedido desde megafonía que cesaran.
El Alba no quería salir, arropaban a Román, hemos propuesto que se desalojara pero la coordinadora de seguridad no lo estima.
Es una pequeña parte de la afición que nos ha arrastrado a todos, Zozulia es víctima como el Rayo, el Alba y la mayoría de nuestra afición.
El Rayo es una víctima, por qué nos van a sancionar, lo que tiene que hacer la Policía es coger las cámaras e identificar a todos los que han insultado.
El Rayo ha puesto todos los medios a su alcance, ayer Jémez hizo un llamamiento de deportividad.
El Rayo es una víctima y hay que mirar qué pasa, yo esta ayuda la llevo pidiendo mucho tiempo y he hablado con políticos, pero miran para otro lado.
Yo entro todos los días por la puerta y pone RIP Presa y todos sois culpables de blanquear esta situación.
A Zozulia le he dado un abrazo porque somos humanos y nosotros no somos quién para decir qué es nadie porque es una persona que no tiene ninguna sanción en el Estado español.
Fue un fichaje que nos hacía muchísima falta porque nos jugábamos irnos a Segunda B.
Aquí tiene derecho a jugar todo el mundo, independientemente de su ideología.
El Rayo le ofreció seguridad las 24 horas a él y su familia pero no se sintió cómodo y no jugó.