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El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 4 de Segovia, en funciones de guardia, ha acordado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del hombre que fue detenido junto a la menor que el pasado sábado había desaparecido de su casa en Albacete y que fue encontrada en El Espiar (Segovia), el jueves 1, en buen estado.
Así lo ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, en un comunicado en el que ha detallado que el detenido está siendo investigado por delitos de agresión sexual a menor de 16 años, corrupción de menores y contacto por internet con menor de 16 años con el propósito de mantener relaciones sexuales.
El Juzgado de Segovia se inhibirá al órgano judicial competente de Albacete, han explicado.
Del arrestado trascendió ayer que era profesor de Robótica en la Universidad a Distancia UNIR.
CINCO DÍAS DE ANGUSTIA
La menor salió de su casa el pasado sábado, 27 de mayo, alrededor de las 15.30 horas, avisando a su madre que iba a hacer un trabajo a casa de una amiga. La madre al ver que se hacía tarde y no regresaba -la niña no tenía móvil- se puso en contacto con la amiga y ni ella ni otras amigas sabían dónde estaba ni habían quedado para hacer ningún trabajo.
Saltaron entonces todas las alarmas y tras una primera búsqueda familiar, denunciaron la desaparición a la Policía Nacional.
El lunes la foto de la menor corría como la pólvora en redes sociales y programas de mensajería móvil para tratar de obtener algún dato que diera con el paradero de la niña.
Los padres temieron desde el primer momento que se hubiera ido, engañada, con alguien.
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La Policía Nacional se limitaba a informar a los medios de comunicación de que trabajaban en la investigación para tratar de localizarla y así lo hicieron. Revisando las cámaras de seguridad del centro de Albacete y las estaciones de tren, vieron que la menor se había subido a un tren con un hombre con el que se había encontrado poco antes en la ciudad. Tiempo después les grabaron en la Estación de Charmartín. Él usaba mascarilla, muy probablemente consciente de que podría ser grabado y localizado así.
Pero el miércoles 31, por la tarde, en pleno directo del programa Más vale tarde de laSexta, los padres se enteraba en directo de la menor había sido grabada en Charmartín, en compañía de un hombre de unos 30 años. La preocupación, lógicamente, era máxima. Ellos pedían que no le hiciera nada y que pudiera volver a casa.
El jueves 1, cerca de las dos de la tarde, recibían la llamada que tanto habían ansiado: la menor está bien y ya se encuentra con la Policía, que además había detenido al hombre con el que estaba. La encontraron en la localidad de El Espinar, en Segovia. Sus padres se trasladaron de inmediato a recogerla.
Un día más tarde, ayer viernes día 2, un programa de TVE informaba, citando a los padres, que la menor les había contado que sí se fue voluntariamente, pero pensando que irían a pasar el día a la capital y volvería a casa, aunque después, ya en El Espinar, la habría encerrado en casa, con las persianas bajadas y se había ocupado de deshacerse de algunas de sus pertenencias, como la mochila rosa, para que no la pudieran relacionar, al estar todos sus datos en medios nacionales.
El padre mantuvo todo el tiempo que si su hija se había ido voluntariamente con alguien era porque esa persona le había engañado, porque su hija no tenía ningún problema en casa, ni con sus progenitores ni con sus hermanos. Su familia cuida ya de ella.
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Además, la Fiscalía de Castilla-La Mancha indicó ayer que ha acordado abrir diligencias por las revelaciones que un programa de laSexta -Más vale tarde- hizo en la tarde del 31 de mayo sobre que la menor que desapareció en Albacete había llegado a Madrid con un hombre de unos 30 años.
En el escrito, remitido a los medios, indicaban que «esas revelaciones pusieron en grave riesgo el final de las investigaciones» y alude que se puso «sobre aviso a los delincuentes».
Destacaron que «pese a ello, las investigaciones han culminado de forma satisfactoria, con la localización de la menor y la detención de la persona que la tenia en su poder» y consideraron que los hechos son «graves» y pueden suponer una «infracción penal».
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Ahora lo más importante es que la menor ya está en su casa, con su familia. Estaría recibiendo tratamiento para asimilar lo ocurrido y se espera que a lo largo de la instrucción se aclare lo sucedido.
La Policía Nacional, mientras tanto, avisa de los peligros de las redes sociales para los menores de edad.
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