El Albacete vence y convence. En un partido dominado de principio a fin, con más y mejor ritmo que en otras ocasiones, con mucha profundidad y llegaba, con juego alegre y práctico, con goles y oportunidades múltiples, el líder es más líder que nunca y continua su marcha hacia el objetivo soñado.
Luís César va teniendo claro cada vez más el once titular, de ahí que repitiera con Calle en punta y Carlos en el lateral derecho, el cual fue un puñall en su banda.
Aunque la primera ocasión fue para el Lucena, con un disparo alto de Santacruz, ex del Albacete, la réplica de los nuestros no acabó en gol de puro milagro. Un saque de banda largo de Carlos que remata en 2º palo Samu, de cabeza al poste, y el rechace le vuelve a él para su disparo sacarlo bajo palos el portero José Ramón. Minutos después, a un centro raso de Jorge Díaz no llega Rubén Cruz. Idéntica jugada pero con distintos protagonistas, Carlos centra y no llegó Calle. El Alba dominaba, llegaba, el gol se estaba cociendo, solo era cuestión de tiempo.
Así en el minuto 31, una subida de Carlos por banda derecha, con pase al centro que recibe Rubén Cruz fuera del área, sacando un disparo con la zurda, ajustado al palo derecho, desde más de 20 metros, al que no llega el guardameta cordobés.
Y lo volvió a intentar Rubén, aunque con distinta fortuna, unos minutos después. Los visitantes estaban a merced del Alba, sin ideas y solo con alguna contra llegaban a nuestra área, pero sin acierto. Así llegaban al descanso.
La segunda mitad siguió mostrando un Albacete con posesión, con ideas claras, muy superior a su rival, llegando por banda, sobre todo la derecha, con un Carlos multiplicándose en tareas de defensa y ataque. Una cabalgada suya acabó con pase de la muerte, pero ni Calle ni Samu llegan a remate, incluso se molestaron, como en una jugada posterior, en la que se entretuvieron y fallaron el gol cuando la grada ya casi lo celebraba.
El gol de la tranquilidad llegó en el minuto 68. Una falta botada con rosca envenenada sobre área pequeña, el bote hace que se le escape al portero José Ramón y el rechace llega a Rojas que fusila a placer.
Había muchos espacios, se triangulaba en el centro, se abría a los costados, se imprimía velocidad y mucho ritmo, la goleada se palmaba en el ambiente.
Un gran centro de Samu termina en vaselina de Calle sobre el larguero. La siguiente jugada., Rubén Cruz de buen disparo obliga al cancerbero lucense. La afición disfrutaba, vibraba y se entregaba a su equipo.
Entraron César Díaz, Sergio Molina y Raúl Ruiz para unirse a la fiesta. Aunque no marcaron, participaron en el juego y tuvieron ocasiones, demostrando que la plantilla es amplia y hay “fondo de armario”.
Con el pitido final, la grada brindó un aplauso de reconocimiento, caluroso y merecido, a este equipo que está dando semana a semana, jornada a jornada, lecciones de fútbol y superioridad ante sus rivales.
