Trabajadores y trabajadoras del sector del transporte sanitario se han concentrado esta mañana a las puertas del hospital de Albacete, para denunciar que llevan desde 2012 con los salarios congelados y sin visos de que se vaya a firmar un nuevo convenio, que en la provincia afecta a más de 400 personas trabajadoras.
Las personas trabajadoras del transporte sanitario, tanto de urgencia como programado, han denunciado esta mañana la situación que están sufriendo como consecuencia del bloqueo “total y absoluto” del convenio colectivo del sector.
Esta es la primera de las movilizaciones que están previstas, pero han anunciado que si no se produce ningún movimiento por parte de las empresas y de la administración para revertir unas condiciones laborales que consideran “inaceptables” y unos sueldos que llevan desde 2012 sin subirse, la semana que viene comenzarán con paros parciales.
Miembros del comité de empresa de UGT y CCOO han pedido disculpas por anticipado a los usuarios y usuarias del transporte sanitario por las molestias que puedan ocasionar, pero han subrayado que es la única de presionar para que se atiendan sus reivindicaciones y se dignifique sus trabajo.
En este sentido, Joan Gastón, de UGT ha incidido en que “llevamos dos años negociando la firma de de un nuevo convenio, pero el Sescam no atiende a nuestras peticiones, y aunque habíamos alcanzado un preacuerdo con la empresa, la administración lo ha ignorado. Estamos realizando una jornada anual de 2.184 horas, haciendo cada trabajador o trabajadora 91 guardias de 24 horas, pasándonos 400 horas de jornada anual”.
Por su parte, José Miguel Escribano, de CCOO, ha señalado que “con estas concentraciones también queremos reivindicar la importancia de nuestro trabajo y que los ciudadanos y ciudadanas sepan que llevamos trece años con el mismo salario”. En este sentido ha recordado que “en 2020 lo que se hizo fue recuperar las condiciones de 2012,
es decir, lo que cobrábamos previamente a que se nos redujera el 30%, por lo tanto estamos con los salarios de 2012”.
Por último, los representantes sindicales han denunciado que a la falta de voluntad de las empresas para firmar un nuevo convenio se suma la nula disposición del Sescam a contribuir a una solución, ya que “el pliego de la futura licitación para la concesión del servicio no está suficientemente dotado económicamente y por lo tanto no deja margen de mejora para los próximos cinco años”
