Por Carlos Garrido
Manuel y Bea comenzaron compartiendo recuerdos de sus viajes en plena pandemia, sin imaginar que su cuenta se convertiría en una referencia para familias viajeras
En un mundo donde las redes sociales han transformado la manera en que viajamos e interactuamos con el mundo, la historia de @TravelersFamily es un ejemplo perfecto de cómo la pasión y la espontaneidad pueden convertirse en algo mucho más grande de lo esperado. Manuel y Bea, una pareja de Albacete, comenzaron su andadura en Instagram sin mayores pretensiones, simplemente con la idea de compartir sus experiencias viajeras. Hoy, su perfil inspira a miles de familias a aventurarse y descubrir el mundo con sus hijos.
Un proyecto nacido en pandemia
La idea de @TravelersFamily surgió en uno de esos días eternos de confinamiento en 2020. «Estábamos en casa, entre bizcochos, pizzas y limpieza, esperando la llegada de nuestra hija Beatriz, cuando nos preguntamos: ‘¿Y por qué no compartimos nuestras fotos de viajes en Instagram? Quizá puedan servir de referencia a alguien'», cuentan. Y así, sin mayor planificación, empezaron a publicar.
El apoyo del público y un crecimiento inesperado
Desde el principio, su contenido generó una respuesta positiva. «Nunca nos hemos fijado en el número de seguidores, pero sí en el apoyo y el entusiasmo de la gente que comentaba nuestras fotos, nos daba ‘me gusta’ y nos animaba a seguir», explican. Este respaldo les motivó a continuar documentando sus viajes, haciendo que su comunidad creciera de manera orgánica y constante.
Redes sociales: una puerta a nuevas experiencias
El impacto positivo de las redes en su forma de viajar es innegable. «Nos ha permitido descubrir lugares nuevos gracias a otros creadores de contenido y conocer a gente maravillosa». Además, el reconocimiento que han alcanzado ha llamado la atención de empresas y oficinas de turismo, que han querido colaborar con ellos. «Nos motiva que confíen en nosotros para dar a conocer sus proyectos e instalaciones desde nuestra perspectiva», afirman.
Afortunadamente, dicen que hasta ahora no han experimentado aspectos negativos en esta aventura digital.
El trabajo detrás de cada publicación
Aunque las fotos y videos que publican en Instagram parecen naturales y espontáneos, la realidad es que la creación de contenido requiere un esfuerzo considerable. «Siempre intentamos hacer lo mejor posible, aunque muchas veces no queda como nos gustaría», confiesan. Al tener trabajos fuera de las redes sociales, dedican sus noches, fines de semana e incluso los trayectos en tren, coche o avión a editar videos y preparar publicaciones. «Lo hacemos sin problema porque nos encanta», añaden.
Viajar en familia: una lección de vida
Más allá de la creación de contenido, Manuel y Bea creen firmemente que viajar con su hija es la mejor educación que pueden ofrecerle. «Cada vez que le decimos que nos vamos de viaje, se le ilumina la cara. Descubrir ciudades, preguntar por todo lo que ve… Nos llena de orgullo verla aprender y crecer a través de los viajes».
Planes de futuro y nuevas aventuras
La agenda de @TravelersFamily está repleta de proyectos ilusionantes. «Tenemos varias colaboraciones cerradas para este año y muchas reuniones interesantes, pero por ahora no podemos desvelar nada. Todo a su tiempo», comentan con entusiasmo.
Desde aquella primera publicación en pandemia hasta convertirse en un referente para las familias viajeras, Manuel y Bea han demostrado que viajar en familia no solo es posible, sino que puede ser una experiencia enriquecedora y compartida. Y a juzgar por su energía y pasión, esto es solo el comienzo de muchas más aventuras.
