0 comment

Ya es realidad un velatorio digno y accesible para Férez

Tras años de espera y de demanda social, la localidad de Férez ya dispone de velatorio municipal. Una infraestructura que permitirá a las familias disponer de un espacio digno, accesible y adecuado para despedir a sus seres queridos, evitando desplazamientos a otros municipios o la necesidad de improvisar en sus propios hogares, como venía sucediendo hasta ahora.

La inauguración ha contado este jueves con el vicepresidente de la Diputación y responsable de Obras, Fran Valera; el delegado provincial de la JCCM en Albacete, Pedro Antonio Ruiz Santos; y el alcalde de Férez, Francisco Javier Jaime, que han coincidido en subrayar la importancia de este proyecto, fruto del trabajo conjunto entre administraciones y de la apuesta firme por mejorar la vida de quienes residen en los pueblos.

El proyecto ha supuesto una inversión total de unos 120.000 euros de la Diputación de Albacete a través de diferentes Planes de Obras y Servicios (POS), concretamente, de los ejercicios 2022 y 2024. Del total, 86.000 euros se destinaban a la adecuación del espacio y 34.000 a facilitar la infraestructura eléctrica indispensable para la prestación del servicio.

Además, la institución provincial ha asumido también la dirección técnica de los trabajos, llevados a cabo por su Servicio de Arquitectura.

Por su parte, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha colaborado con una ayuda extraordinaria que ha dotado al velatorio de mobiliario, mientras que el Ayuntamiento de Férez ha sido clave como impulsor de la iniciativa y como garante de que esta necesidad, largamente expresada por la población, se convirtiera en realidad.

Valera: “Más que un edificio, hacer posible este velatorio es un acto de dignidad”

Ante los vecinos y vecinas que han acompañado el momento, el vicepresidente provincial ha subrayado que este velatorio es mucho más que un edificio, convirtiéndose en “un acto de dignidad” hacia las personas y hacia las familias. “En un momento tan delicado como es la despedida de un ser querido, tener un espacio adecuado, accesible y pensado para acompañar, es una necesidad básica que hoy queda cubierta en Férez”, ha señalado, incidiendo en su importancia para evitar desplazamientos a otras localidades o velatorios en las casas.

Fran Valera también ha puesto en valor la unidad institucional que hace posible esta actuación, incidiendo en el esfuerzo del Ayuntamiento local y destacando la figura de su alcalde “que le pone corazón a todo lo que hace”, y ha subrayado que invertir en este recurso es hacerlo “en respeto, en calor a quienes lo necesitan en un momento complicado, en convivencia y en armonía”.

De hecho, ha asegurado que “los ayuntamientos, la Diputación, la JCCM tenemos que estar para todo: para las cosas más agradables (como cuando hace un tiempo vinimos a inaugurar el centro polivalente) y también para aquellas que son menos agradables, porque tenemos que favorecer que la gente se sienta arropada”. Y este nuevo espacio es un paso fundamental en esa dirección, siendo también un perfecto ejemplo de lo que significa la Diputación en cada pueblo: cercanía, utilidad y transformación real del día a día.

Ruiz Santos subraya el papel de la colaboración institucional en el impulso de servicios de gran valor social

Desde el gobierno regional se ha provisto de una ayuda extraordinaria para dotar de mobiliario a este espacio acogedor, funcional y respetuoso con la intimidad de las familias. Tal y como ha destacado el delegado, esta colaboración pública resulta esencial para municipios pequeños como Férez, donde el apoyo institucional facilita la puesta en marcha de servicios de gran valor social que, de otro modo, serían muy difíciles de asumir únicamente con recursos municipales.

En este sentido, Pedro Antonio Ruiz Santos ha agradecido el trabajo a todas las instituciones, entidades y personas que han contribuido a su puesta en marcha, y ha felicitado también a su alcalde, señalando el esfuerzo que hay detrás de este proyecto, y advirtiendo que cuando alguien fallece “hay que despedirlo en su tierra, y hay que hacerlo con amabilidad y dignidad para la persona que se va y para las familias, y eso sí es pensar en un pueblo”.

Además, ha insistido en la importancia de este nuevo recurso, apuntando que “a la hora de diseñar el futuro de un territorio, siempre se piensa en el crecimiento, en los polígonos, en el empleo… y eso es fundamental y es prioritario en todos los municipios, pero hay otros servicios que, a veces, queremos que sean invisibles y que son absolutamente necesarios y éste es uno de ellos”.

El alcalde explica que será un servicio público gestionado por el Ayuntamiento

Por su parte, el alcalde de Férez se ha mostrado agradecido a sendos gobiernos, provincial y regional, por el apoyo que ha hecho posible dotar de este nuevo recurso a la localidad, así como a los trabajadores y trabajadoras del Ayuntamiento y a todas las personas y entidades que han participado de una u otra forma.

Francisco Javier Jaime ha expresado su satisfacción por contar con esta instalación que viene a reflejar el compromiso del Ayuntamiento por garantizar calidad de vida y dignidad a sus habitantes en todas las etapas de la vida, y ha explicado que “este servicio necesario y urgente” se ha diseñado pensando en la privacidad y la comodidad de las familias, apuntando que será un servicio público, con apertura 24 horas y gestionado por el propio consistorio.

Una instalación digna y adaptada a la normativa

El nuevo velatorio, situado en el cementerio municipal, cuenta con casi 200 m² construidos, distribuidos en diferentes espacios: sala de duelos, sala de exposición del cadáver con acristalamiento, tanatoestética, office y sala de estar, aseos accesibles y dependencias técnicas. También dispone de sistemas de refrigeración específicos, ventilación independiente, grupo electrógeno y fosa séptica, garantizando el cumplimiento de toda la normativa sanitaria y de accesibilidad.

Con esta nueva infraestructura, Férez suma un servicio fundamental que mejora la calidad de vida de sus habitantes y refuerza la idea de que, gracias a la colaboración entre administraciones, los pueblos pequeños pueden disponer de los mismos derechos y servicios que las ciudades.