Dos victorias, un empate y una derrota
En cuatro ocasiones ha visitado anteriormente el filial del FC Barcelona el Carlos Belmonte, con disparidad de resultados ya que por dos veces ganaron los albaceteños, una los blaugranas y, en la última, se produjo un empate. Todos los enfrentamientos fueron en Segunda División.
La primera visita fue en la campaña 85-86, cuando el filial se denominaba Barcelona Atlético. Fue una temporada complicada para los manchegos, con una presencia efímera en Segunda ya que habían alcanzado la categoría de plata el verano antes y no pudieron mantenerla. Este partido se jugó en la jornada 27, con Pachín en el banquillo local y situados en puestos de descenso, de los que no saldrían a pesar de la victoria. El Barcelona Atlético presentaba un equipo con un grupo de jugadores que apenas tuvieron continuidad en el fútbol profesional, ya que muy pocos continuaron en Segunda y casi ninguno llegó a Primera. En la plantilla del filial azulgrana sólo destaca la presencia del actual entrenador del Barcelona B, Jordi Vinyals. El partido fue casi un monólogo azulgrana, pero lo que tienen los filiales, a pesar de ello el triunfo fue para el Albacete, mucho más efectivo de cara a portería. Garmendia tuvo que trabajar de lo lindo y los delanteros azulgranas erraron un sinfín de ocasiones. López adelantó al Barcelona Atlético en el minuto 28 y sólo uno después una imprecisión de la zaga visitante fue aprovechada por Cazaurang para empatar. Y al poco de comenzar la segunda parte el árbitro dio validez a un gol de Cazaurang en el que los visitantes protestaron por fuera de juego, y a pesar del mejor juego e intención de los blaugranas el marcador ya no se movió (2-1).
En la temporada 96-97, con el retorno del Albacete a Segunda tras su paso por Primera, el Barcelona B visitó el Belmonte en la séptima jornada de liga, con el debut en casa de Mariano García Remón, que en la sexta jornada se había hecho cargo del equipo tras la destitución de Manolo Jiménez. El Alba jugó un mal partido, fue de más a menos, y a ello también contribuyó el arbitraje del navarro Pérez Izquierdo. Nada más empezar la segunda parte mostró una más que rigurosa cartulina amarilla a Albert Tomás, que era la segunda, con la consiguiente expulsión. En el lanzamiento de falta, el azulgrana Juanjo remató al fondo de las mallas y ahí acabó el partido (0-1). Pérez Izquierdo la lió más si cabe con un penalti de Mingo sobre Manolo que no señaló al pitar un fuera de juego de Luna, que lejos de la jugada, incluso en lugar de ir hacia el balón intentó salirse del campo para evitar precisamente esa posición de fuera de juego. Para rematar la faena mostró cartulina amarilla a Mingo por la entrada sobre Manolo. Surrealista. Una lluvia de almohadillas despidió al trencilla. En el Barcelona B estaba el referido Mingo, que luego fue jugador del Albacete, así como Jon Bakero (hermano de José Mari), Rufete, Arnau, Setvalls y Gerard, entre otros.
El Barcelona B descendió esa temporada y ascendió a la siguiente, con lo que en la 98-99 regresó al Belmonte ya casi al final, en la jornada 38, disputada a finales de mayo. El Albacete ganó el partido con solvencia (3-0) y la victoria alejaba a los manchegos del descenso, todo lo contrario de un Barça B que volvió a descender a pesar de tener una plantilla cargada de futuras figuras como Puyol, Xavi, Gabri y Jordi Ferrón, que luego jugo en el Albacete. Con un Belmonte casi lleno, el Albacete realizó uno de los mejores partidos de la temporada. Abrió el marcador Vulevic en el minuto 15 a centro de Juli. A la media hora el colegiado, sin explicación, anuló un gol a Luque. Ya en la segunda mitad Tito marcó el 2-0 con una fuerte disparo desde lejos y ya en la recta final del choque Leandro lograba el 3-0 a centro de Zalazar, que había regresado en el mercado invernal para jugar sus últimos minutos como profesional con la camiseta del Albacete, aunque luego todavía siguió ‘matando el gusanillo’ un año más en Tercera junto a Catali y Toril en el Quintanar del Rey.
La última visita del Barcelona B fue en la temporada 10-11 y terminó en empate. Era la 16ª jornada, primeros de diciembre, con el Albacete de Calderón penúltimo en la tabla. El filial azulgrana tenía en su banquillo a Luis Enrique y se encontró con un empate casi regalado por un Albacete que no supo cerrar el partido. El equipo de Calderón jugó muy bien, se puso 2-0 en el marcador con goles de Asen y Tato, pero en el minuto70, y justo después de poder marcar el 3-0 que habría sido definitivo, se le fundieron los plomos y llegaron los goles de Nolito y Jonathan Soriano que empataron el encuentro para desilusión y desesperación de la afición, ya que era la undécima jornada sin ganar que acumulaban los manchegos. Figuras en ciernes en ese Barcelona B donde, además de los goleadores Nolito y Jonathan Soriano también estaban Bartra, Muniesa, Fontàs, Oriol Romeu y Tello.