Entre ayer sábado y hoy domingo, ya son cinco las viviendas que han tenido que ser derribadas en Letur, tras haberse visto gravemente afectadas por el paso de la riada que sacudió a la localidad el martes. Riada que deja ya dos mujeres fallecidas y tras la que se sigue buscando a cuatro vecinos desaparecidos.
Beatriz López Núñez, jefa del Servicio de Proyectos y Planes Provinciales de la Diputación de Albacete, tras la inspección ocular realizada el sábado junto con al arquitecto provincial Juan Antonio Jiménez Torrente, comprobaba in situ los “efectos desvastadores” producidos por la riada ocasionada por la DANA en Letur, donde “la crecida extraordinaria y súbita del arroyo arrasó y anegó todo cuanto encontraba a su paso”, como se desprende en su informe.
Crecidas que sucedieron, a lo largo de la jornada del 29 de octubre, hasta en tres ocasiones: dos muy seguidas, a últimas hora de la mañana; y una tercera, ya por la noche.
Ese primer estudio ocular concluía que las edificaciones más afectadas se encuentran en las calles Moreras, Aurora, Barranco y Garrobo, dentro de un área que, a la mayor brevedad, quedó desalojada. Como explicaba el presidente de la Diputación, Santiago Cabañero, “hay unos 10 edificios que ya están identificados como gravemente afectados; y esta misma mañana, si el tiempo lo permite, se va a derribar una de las casas porque ya se ha identificado que está mal”.
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En este sentido, el presidente ha aludido también a esa otra parte de la que no se suele hablar pero que es absolutamente vital e imprescindible para operar: la parte burocrática, esos informes, incluso esos Decretos de Alcaldía en los que también el equipo de Diputación, desde el Servicio de Atención Técnica a Municipios, también está ayudando haciendo posible que se pueda actuar y que se haga con la mayor seguridad.
También detallaba que “hay dos de las calles que todavía no se ha podido entrar a inspeccionar, con lo cual, esa cifra que yo les daba, de 10 viviendas afectadas en estos momentos, es ‘en estos momentos’; en el momento en el que los arquitectos puedan entrar a valorar con los bomberos otras edificaciones, probablemente ese número va a crecer”.
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