El Albacete Balompié soñó con sacar un punto de El Molinón y lo mereció por el partido planteado en la casa del firme aspirante a Primera, pero el encuentro acabó con 2-1, después de que Castro, en los últimos finales pusiera por delante, de manera definitiva, a los suyos. Y todo ello, tras el empate en el marcador antes del paso por vestuarios, de Dani, de penalti.
A la media hora de juego en El Molinón, el Sporting de Gijón se adelantaba en el marcador. Evitó el gol primero Tomeu Nadal, al detener el zapatazo de Jony, pero le cayó al jugador el esférico y al rechace anotó el delantero del Sporting.
Hasta el gol, el Albacete Balompié había estado generando peligro y Morillas, de cabeza a pase de Zozulia, tuvo la ocasión más clara para el Albacete Balompié, aunque no pudo subir el gol al marcador. El parido volvió a cambiar poco antes del paso por vestuarios, con el penalti que Jony cometió sobre Álvaro y que le valió, además, la amarilla al jugador local. Lo lanzó Dani y sumó el 1-1 en el marcador, entre el enfado de la afición local.
Más de medio centenar de aficionados del Alba animan a los de Enrique Martín en El Molinón.
El canterano Varo fue titular en el partido contra el Sporting de Gijón, en el Molinón, y avanzada la segunda mitad, tras un gran partido, entró por él Acuña.
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