Si se mantuvieran las tendencias demográficas actuales, España perdería un millón de habitantes en los próximos 15 años y 5,6 millones en los próximos 50 años.
El porcentaje de población mayor de 65 años, que actualmente se sitúa en el 18,2% pasaría a ser el 24,9% en 2029 y del 38,7% en 2064.
El número de defunciones superaría por primera vez al de nacimientos a partir de 2015.
Las únicas comunidades autónomas que ganarían población en los próximos 15 años son Comunidad de Madrid, Canarias, Illes Balears, Región de Murcia y Andalucía.
Estas son algunas de las conclusiones del estudio de Proyección de la Población de España 2014-2064 que ha publicado este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Advierte que la población de España descendería un 0,15% en 2014, continuando con la tendencia negativa iniciada en 2012, en caso de mantenerse las tendencias demográficas actuales.
En los próximos 15 años España perdería 1.022.852 habitantes (un 2,2%) y en los próximos 50 años más de 5,6 millones (un 12,1%). De esta forma, la población se reduciría hasta 45,8 millones en el año 2024 y hasta 40,9 millones en 2064.
La reducción de la población residente se debe, principalmente, al progresivo aumento de las defunciones y a la disminución de los nacimientos, fenómeno especialmente acusado a partir de 2040. Se produciría así un saldo vegetativo negativo, ya desde el segundo año de la proyección (2015), que supondría un total de ocho millones de personas en los 50 años proyectados.
Este saldo negativo no se vería compensado con el saldo migratorio, que sería positivo en el mismo periodo con cerca de 2,5 millones de migraciones netas con el exterior.
Crecimiento vegetativo: nacimientos y defunciones
El número de nacimientos seguiría reduciéndose en los próximos años, continuando con la tendencia iniciada en 2009. Así, entre 2014 y 2028 nacerían en torno a 5,1 millones de niños, un 24,8% menos que en los 15 años previos. En 2029 la cifra anual de nacimientos habría descendido hasta 298.202, un 27,1% menos que en la actualidad.
La proyección realizada contempla que la fecundidad de las mujeres mantenga una ligera tendencia a la baja. Así, el número medio de hijos por mujer sería de 1,24 en 2029 y de 1,22 al final del periodo proyectado, frente al 1,27 actual.
La edad media a la maternidad, que se sitúa actualmente en 31,7 años, seguiría creciendo paulatinamente hasta acercarse a los 33 años al final del periodo.
El descenso en el número de nacimientos vendría determinado, sobre todo, por la reducción del número de mujeres en edad fértil. De hecho, el número de mujeres entre 15 y 49 años bajaría en 1,9 millones (un 17,4%) en 15 años, y en 4,3 millones en 50 años (un 39,2%).
Por otro lado, la esperanza de vida al nacimiento alcanzaría los 84,0 años en los varones y los 88,7 en las mujeres en 2029, lo que supone una ganancia respecto a los valores actuales de 4,0 y de 3,0 años, respectivamente.
En 2064, de mantenerse la tendencia actual, la esperanza de vida de los hombres superaría los 91 años y la de las mujeres casi alcanzaría los 95.
De la misma forma, una mujer que alcanzase la edad de 65 años en 2064 viviría en promedio otros 30,8 años más (27,4 en los hombres), frente a los 22,9 años de supervivencia actuales (19,0 para los hombres).
A pesar de la pérdida de población y la mayor esperanza de vida, el número de defunciones seguiría creciendo como consecuencia del envejecimiento poblacional. Así, en el periodo 2014-2029 se llegarían a registrar más de seis millones de defunciones, un 7,1% más que a las observadas en los 15 años previos (1999-2013).
En el año 2029 se producirían 412.685 fallecimientos entre los residentes en España y en 2063 se llegaría a 559.858 defunciones (frente a los 395.163 del año 2014).
El descenso de la natalidad y el envejecimiento poblacional provocarían que en 2015 en España hubiera más defunciones que nacimientos, es decir, que el saldo vegetativo se hiciera negativo.
Proyecciones de población por comunidades autónomas (2014-2029)
De mantenerse la evolución demográfica observada, la pérdida de población se extendería a la mayoría de comunidades autónomas en los próximos 15 años.
Los mayores descensos, en términos relativos, se registrarían en Castilla y León (–9,0%), Principado de Asturias (–8,3%) y Galicia (–7,6%). En Castilla-La Mancha el descenso sería del 1,4%.
Por el contrario, la población aumentaría en Comunidad de Madrid, Canarias, Illes Balears y en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Comunidad Foral de Navarra (–0,2%), Andalucía (0,0%) y Región de Murcia (0,1%) prácticamente mantendrían el mismo tamaño poblacional que en la actualidad.