Liberbank nos amenaza con cerrar el Centro Cultural de la Calle San José de Calasanz y el Centro de Mayores de la Calle del Carmen y de paso mandar a la calle del Cid a los seis trabajadores de la Fundación CCM que prestan sus servicios en dichos centros, además de otros casi veinte, que de una u otra forma trabajan en alguno de estos dos lugares y que verían peligrar su medio de vida. Vamos, los famosos daños colaterales.
Y si Liberbank nos amenaza con la venia de su señoría, que para el ERE necesita autorización judicial, nosotros, los mortales ciudadanos que no necesitamos ni permiso ni autorización de nadie para amenazar a quien se lo merezca, bien podríamos conminar a Liberbank a que deponga su actitud, y en caso contrario proceder a cerrar nuestras estimadas y modestas (al menos la mía) cuentas y libretas de ahorro y mandar a freír espárragos a quien ha tenido la feliz idea de iniciar primero un ERTE y después un ERE en la Fundación CCM, heredera de la antigua Obra Social de la CCM. Somos muchos los que opinamos que no merece consideración alguna, quien no la tiene para los demás
Una Fundación que heredó el patrimonio que era de todos los que teníamos una cuenta en la CCM y que ahora aduciendo, como no, motivos económicos, pretende bajar la persiana “sine die” de un Centro Cultural y un Centro de Mayores, eso en Albacete, que en el resto de la región la felonía afecta a otros doce trabajadores y a otros siete centros, repito, alegando motivos económicos.
Unos motivos económicos que, al menos para mí no tienen mucha explicación, cuando podíamos leer el pasado 5 de agosto que Liberbank tuvo un beneficio neto atribuido en el primer semestre del año 2015 de 125 millones de €, un 3,5% más que en el mismo periodo del año anterior. No me extraña que los sindicatos que representan a los trabajadores hablen incluso de ERE ilegal ante estas cifras, y otras, que solo los más iniciados entienden y casan, pero que al decir de los analistas de Citi se traduce en que el ROE, que es el indicador que mide la rentabilidad financiera de un entidad bancaria, previsto en el 5,4% para este año, alcanzará un 8,6% en 2017, y ni cortos ni perezosos los responsables de la Fundación inician un ERTE y ahora un ERE alegando motivos económicos. Ocurrentes ellos.
Por cierto, unos responsables que fueron nombrados por el anterior gobierno de Cospedal y a cuya cabeza se sitúa el antiguo viceconsejero de Educación del Gobierno anterior, y que a pesar de ser nombrados por las Cortes de Castilla-La Mancha, Diputaciones Provinciales, Consejería de Empleo, Federación de Municipios de CLM y el Consejo de Servicios Sociales Regional ocupan sus cargos a título personal por lo que solo lo abandonarían previa renuncia. Si alguien entiende esta contradicción entre lo que dice la razón y lo que figura en los Estatutos de la Fundación, que me lo explique detenidamente.
Los Patronos de la Fundación CCM deberían presentar su dimisión de forma irrevocable mañana a lo más tardar, no tiene ningún sentido estar nombrado por un Gobierno que ya no gobierna y representar a quien ya no tiene representación alguna, pero antes, hoy mismo, deberían pedir al Juez que autorizó el ERE que lo paralice hasta que los nuevos responsables conozcan la situación, evalúen las consecuencias de seguir adelante con él y traten de hacer entender a los responsables de Liberbank que esta decisión puede ser un boomerang que se vuelva en contra de la propia entidad, porque al menos con mi respaldo, como depositante de Liberbank, cuentan y poco trabajo me cuesta, por no decir ninguno, llevarme mi pequeña cuenta a otro banco, aun sabiendo que las diferencias entre unos y otros son del tamaño del canto de un papel de fumar, y si todos los que nos sentimos de alguna forma amenazados por Liberbank por intentar quitarnos algo que consideramos como nuestro, les hiciéramos participes de nuestra intenciones, igual, solo igual, se lo pensaban un poquito y cambiaban de actitud, o al menos eso quiero creer.
Y que conste, que si no he tomado antes esta decisión es porque me fastidia (por no decir la palabra en la que tú también estas pensando, ya que estoy escribiendo esto en horario infantil) que pague los platos rotos Pepe el de la Caja. Todos tenemos a un Pepe de turno, ese buen hombre que nos abrió la cartilla hace un porrón de años, que nos tramitó el primer préstamo, que después se lo curró para la hipoteca de la casa y que me llama de vez en cuando para ofrecerme tal o cual producto, o simplemente para decirme que lo siente, y que no me asuste, pero que la comisión por custodia y mantenimiento de mi estimada cuenta (no vale reírse, que eso es lo que pone en la documentación que me llaga a casa) ha pasado a ser de 9,75 € trimestral, para luego obligarte a realizar la mayoría de las operaciones en el Cajero Automático, que esa es otra.
Y a pesar de ello, como debemos ser algo masoquistas, aún seguimos manteniendo la cuenta en la Caja, evidentemente más por fidelidad a las personas que a la entidad, que no se merece mucha consideración habida cuenta de la escasa que muestran con nosotros.
Esta situación aún es reconducible, al igual que también lo es la del Alba, a pesar de los dos empates cosechados hasta la fecha y gracias, que si no es por la soberbia actuación de Juan Carlos, igual estábamos hablando de otra cosa. Eso sí, todos deberíamos remar en la misma dirección, exigirle a Liberbank que cumpla con su obligación y no buscar dianas ajenas donde lanzar nuestros dardos interesados. Errar el tiro puede ser nuestra perdición.
