La luna llena ha deslucido casi todas las lluvias de estrellas de este año y volverá a hacerlo con las Táuridas, una precipitación de meteoros que «ni es muy intensa, ni tiene bien definido el máximo de actividad» y que «es muy dispersa en el tiempo» porque durará casi dos meses, como detalla ABC.
El experto del Observatorio Astronómico Nacional (OAN), Mario Tafalla, explica que las Táuridas de 2014 «no son muy prometedoras» para el aficionado a contemplar este tipo de espectáculo cósmico pero, al solaparse con otras lluvias de estrellas como las Oriónidas o las Leónidas, «cualquier noche es posible ver una estrella fugaz» durante las próximas semanas.
Las Táuridas se prolongan este año desde el 19 de octubre al 10 de diciembre y, aunque el máximo «se prevé para el 4 de noviembre», Tafalla ha recordado que «no hay un día en el que puedan verse mucho más o mejor que otro, porque están siendo poco intensas y dispersas», lo que considera «una pena», y más con el buen tiempo que está haciendo y que facilita la observación.
El número previsto de meteoros es «únicamente de cinco por hora» y la jornada en la que se supone se podrán contemplar más está demasiado cerca de la luna llena, por lo que en realidad «no se van a ver casi nada».