El sector de los hidrocarburos ha sufrido una gran transformación durante la crisis por la caída del consumo de carburantes y el auge de las gasolineras low cost. Así, los sindicatos CCOO y UGT denuncian la destrucción de hasta 15.000 puestos de trabajo en el sector en los últimos cinco años, mientras se han abierto 1.486 nuevas estaciones de servicio en el mismo periodo. En Castilla-La Mancha cifran en 600 los empleos que se han perdido por este tipo de gasolineras que, además, urgen a regular porque aquí la normativa exige que haya personal en estos centros 24 horas y no se está cumpliendo.
Cada vez son menos las gasolineras con personal de pista para ayudar en el repostado, o aquellas que abren 24 horas para dar servicio al turno de noche. De hecho, hoy en día solo una de cada cuatro estaciones de servicio en España tiene turno 7×24, según la estadística de puntos de distribución que publica el Ministerio de Industria. La crisis ha hecho que en la mayoría se prescinda del turno de noche.
Desde el año 2010, el consumo de gasolina se ha hundido un 23,7%, hasta 4,2 millones de toneladas, mientras el de diésel -el combustible más usado por el parque móvil- ha caído un 15,6%, situándose en 20,7 millones de toneladas. Tras siete ejercicios de caídas consecutivas, este año parece que la mejora económica ha llegado al coche y el consumo de carburantes acumula una recuperación del 3,1% hasta abril, pero los sindicatos auguran que el empleo seguirá a la baja.
La destrucción de empleo se ha centrado principalmente en las estaciones de servicio independientes, muchas de las cuales están abanderadas por las grandes petroleras. Los gigantes del sector también reconocen «una pequeña tendencia a la baja» del empleo en las gasolineras de su propiedad, si bien han soportado mejor la situación al disponer de mayor músculo financiero para combatir la caída del consumo y la mayor competencia.
Los sindicatos vinculan casi la mitad de los despidos al alza de las gasolineras low cost que operan sin personal, muy populares en los últimos años por ofrecer descuentos de hasta siete céntimos por litro en la venta de carburantes con respecto al precio medio del país.