“Ya no hay marcha atrás, de momento el equipo se retira de la competición. Estamos muy tristes por la situación”, decía hoy el entrenador del Hellín, Yoyo Ocaña, equipo que no seguirá en Tercera.
“Creo que no deberíamos haber salido, pero se salió y en las condiciones en que estábamos no se puede trabajar”. “No denunciamos, pero era una promesa de Manolo que había que salir, que no quería dejar morir al Hellín, se comprometió a abonarme la deuda que tenía y ha cumplido. Yo le dije que le perdonaba todo porque en las condiciones en que íbamos a salir no se podía competir y al final he llevado razón”, ha explicado.
“Las condiciones en las que entrenábamos eran imposibles y no nos han dado ninguna facilidad en el pueblo. Agradecer a los cuatro o cinco aficionados que iban. Desde las administraciones todo han sido trabas”, detallaba.
“No podíamos desplazarnos allí para ir a entrenar, teníamos que buscarnos la vida aquí en Albacete”. “Teníamos que viajar en los coches de los jugadores y comían en tupper, así no se puede competir”, lamentaba.
“Creo que esta es la mejor medida para que todo el mundo descanse”, valoraba. «Es muy triste que un histórico acabe así».